Museo del Tesoro de Guarrazar en Guadamur

Visitamos Guadamur este verano para conocer principalmente su castillo, y aprovechando que ya estábamos allí, quisimos conocer el Museo del Tesoro de Guarrazar. Este museo es un museo pequeñito que ocupa el lugar de las antiguas escuelas y tiene como objetivo conocer el pasado visigodo de Toledo y la historia de Guadamur, además de ser el Centro de Interpretación del Tesoro de Guarrazar.

Si aún no has visitado Guadamur, te dejamos nuestra experiencia en el castillo: visita al Castillo de Guadamur

Algunos datos prácticos del museo

Cómo llegar al Museo del Tesoro de Guarrazar

El Museo del Tesoro de Guarrazar se encuentra en la calle Nueva número 17 de la localidad toledana de Guadamur. Puedes seguir las mismas indicaciones que ya explicamos en la visita al Castillo de Guadamur. Además, si haces la visita combinada, tras la visita al castillo que finaliza en la oficina de turismo, continúas con el guía hasta el Museo del Tesoro de Guarrazar, adonde se llega a pie en apenas un minuto.

Localización del Museo del Tesoro de Guarrazar

Horario de visita del Museo del Tesoro de Guarrazar

Puedes visitar este museo de Guadamur de lunes a miércoles en horario de 9:00 a 14:00, y sábados y domingos de 10:00 h a 14:00. Te recomiendo que te pongas en contacto con la oficina de turismo de Guadamur por si hubiese cambiado el horario cuando realices tu visita.

Precio de la entrada al Museo del Tesoro de Guarrazar

3 euros si sólo visitas el museo, y 1 euro el precio adicional que pagarías si visitas el castillo. Es decir, por 6 euros visitas el Castillo de Guadamur y el Museo de Guarrazar.

También tienes otra entrada combinada para los dos museos de Guadamur por 5 euros: el Museo del Tesoro de Guarrazar y el Museo Etnográfico de Guadamur.

Duración de la visita

Media hora.

Qué puedes ver en el Museo del Tesoro de Guarrazar

La historia visigoda del Reino de Toledo

El Museo de Guarrazar te introduce en la España visigoda con unos paneles informativos con la historia visigoda de Guadamur y Toledo. El Reino visigodo de Toledo fue fundado tras la derrota de los visigodos ante los francos en la batalla de Vouillé ocurrida en la primavera del año 507. Esta derrota obligó a los visigodos a poner fin al Reino visigodo de Tolosa (hoy Toulouse) y desplazarse a Hispania, situando la capitalidad en Toledo. Esto dio origen a este reino visigodo, que perduró hasta la invasión musulmana de la Península Ibérica en el 711.

En los paneles podemos leer la historia de este reino, así como ver imágenes de algunas de las personalidades más importantes de la época. Entre ellos se encuentran San Isidoro de Sevilla y los reyes Leovigildo y su hijo Recaredo, con quienes el Reino visigodo de Toledo alcanzó la plenitud, en la segunda mitad del siglo VI y primera del VII. En una de las imágenes incluso podemos ver la conversión del rey Recaredo al catolicismo en el 589.

Objetos arqueológicos originales

En vitrinas encontramos algunos objetos arqueológicos originales del antiguo poblado de Guarrazar como son los que puedes ver en la imagen anterior. En esta imagen encontramos:

• Una basa de columnilla en piedra caliza de los siglos VI – VII.
• Un fragmento de friso en piedra caliza de los siglos VI – VII, donado al museo por Don Juan Ignacio González Hornillos.
• Un fragmento de hornacina con venera en mármol, de los siglos VI – VII, donado al museo por Don Pedro Alonso.

Parece que el antiguo poblado de Guarrazar se abandonó a raíz de la conquista de Toledo en el año 1085, y desde entonces muchos de los materiales del poblado se utilizaron para la construcción de las casas medievales de Guadamur. Ya en el siglo XIX, en los años 70 y 80, el párroco de Guadamur pidió a sus vecinos relieves procedentes del antiguo poblado de Guarrazar para colocarlos en las iglesias de Guadamur. Y posteriormente algunos de los objetos arqueológicos fueron donados al Museo del Tesoro de Guarrazar por los dueños de las casas en las que fueron colocados.

Entre estos objetos también se encuentra esta piedra con inscripciones del siglo VII cedida por Don Paulino Gutiérrez.

Otro tipo de objetos arqueológicos que puedes ver en el Museo de Guarrazar son esta jarra y patena de consagrar del siglo VII.

Libros antiguos

Entre los objetos visigodos que puedes ver en el museo tienes estos libros de liturgia hispano-visigoda tan llamativos. Esta liturgia de la Iglesia católica fue también llamada rito mozárabe, que es la que se consolidó en el Reino visigodo de Toledo, y que fue practicada en los territorios hispánicos hasta el siglo XI, tanto en áreas bajo dominio cristiano como musulmán.

También se conservan otros libros antiguos que recogen la historia y conservación del Tesoro de Guarrazar, como esta página que habla de las coronas conservadas en la Armería Real de Madrid.

Tesoro de Guarrazar

La estrella del Museo de Guarrazar es el tesoro visigodo de Guarrazar, que es un importantísimo conjunto de piezas de orfebrería visigótica hallados en Guadamur. Son un conjunto de coronas destinadas a ser colgadas del techo y cruces que fueron ofrecidas por los reyes Suintila y Recesvinto a la iglesia de Toledo. En el Museo de Guadamur se muestran reproducciones del Tesoro de Guarrazar, ya que las piezas originales están repartidas entre el Museo Arqueológico Nacional en Madrid, la Armería del Palacio Real de Madrid y el Musée Cluny de París.

En la primera vitrina que es la que mostramos en la fotografía anterior encontramos, de izquierda a derecha, la Corona de Teodosio, la Corona de Suintila y una corona de estructura calada de diez tramos. La que más impresiona de este primer conjunto es por supuesto la Corona de Suintila, una de las piezas más importantes del Tesoro de Guarrazar, del siglo VII. La corona original fue regalada a Isabel II en 1861 por uno de los descubridores del Tesoro de Guarrazar, y se conservó en el Palacio Real de Madrid hasta que fue robada en 1921. Desde entonces, la Corona de Suintila está desaparecida.

Debajo de estas coronas el Cetro real de Suintila, también del siglo VII.

En otra vitrina se expone la reproducción de la Corona de Recesvinto, que es otra de las piezas más importantes del tesoro visigodo e incluso me atrevería a decir que es la pieza más famosa del Tesoro de Guarrazar. Es la corona central de esta fotografía, que se expone junto a otras dos coronas votivas más pequeñas. La de la derecha es una corona votiva de lámina repujada con arcos calados.

El original de la Corona de Recesvinto es del siglo VII y se puede visitar en la actualidad en el Museo Arqueológico de Madrid.

Y en una última vitrina de la reproducción del tesoro visigodo se exponen otra corona votiva, los dos brazos de la llamada Cruz de Recesvinto y una cruz votiva.

El hidalgo de Guadamur

La visita al Museo del Tesoro de Guarrazar finaliza con la historia de Don Hernán Álvarez de Mesa, el hidalgo de Guadamur, mostrando una carta ejecutoria de hidalguía en la que se reconoce la condición de hidalgo a este toledano Hernán o Hernando Álvarez de Mesa. Esta carta ha sido cedida temporalmente por el empresario textil Antonio Pedrera Soler al Museo de Guarrazar, y el Ayuntamiento de Guadamur ha encargado a la historiadora Lourdes de la Cruz Palomino la transcripción del manuscrito.

Una carta ejecutoria es algo equivalente a lo que sería un expediente en la actualidad, y pone de manifiesto la nobleza y poder económico de Don Hernán Álvarez de Mesa. Está compuesta por 70 páginas que recogen declaraciones de ocho testigos en las que defienden la condición de hidalgo de Hernando Álvarez de Mesa. Su hidalguía se reconoció el 28 de marzo de 1541 y con ello, por ser noble, evitó pagar un tributo al rey por la compra de unas tierras en la villa de Guadamur.

En el documento también se manifiesta que el abuelo de Don Hernán Álvarez de Mesa tenía una cantera de piedra blanca que abastecía a la Catedral de Toledo y también proporcionaba piedra para la construcción del Monasterio de San Juan de Los Reyes.

El documento histórico no sólo tiene importancia por toda la historia que revela, sino porque además tiene un estado de conservación magnífico y una riqueza en las miniaturas que aparecen en él y que mantienen un color de calidad máximo. Desde luego el documento es muy llamativo y espectacular.

Y después de este paseo por el Museo del Tesoro de Guarrazar en Guadamur, me entraron muchísimas ganas de realizar la visita al Yacimiento Arqueológico de Guarrazar, que está a sólo poco más de 2 kilómetros del museo pero cuando yo fui a Guadamur sólo realizaban visitas nocturnas, así que tendré que planificarlo con más tiempo.

La otra visita que me apetece muchísimo realizar es al Museo Arqueológico Nacional que está en Madrid, un museo que he visitado varias veces, por cercanía, y que estimo que pronto le haré otra visita para conocer las piezas originales del Tesoro de Guarrazar.