Comer en Toledo: restaurante Alfileritos 24
Ya te comenté hace algunas semanas que en noviembre pasamos un fin de semana en Toledo. Fueron sólo dos días en los que disfrutamos recorriendo la ciudad de las tres culturas, pudimos dormir en un hotel histórico y también comimos en alguno de los mejores restaurantes de Toledo. Entre ellos está el restaurante Alfileritos 24 del que os voy a hablar hoy, un lugar que me recomendaron varias amigas y que superó altamente mis expectativas.
El restaurante Alfileritos 24
Dónde está el restaurante Alfileritos 24 de Toledo
Me resulta curioso que el restaurante Alfileritos 24 toma su nombre precisamente de la calle y número de portal en la que se ubica. La calle Alfileritos aparece en pleno casco histórico de Toledo, una calle estrecha, larga y que desprende mucho encanto. Entre palacetes y antiguos caserones encontramos el restaurante Alfileritos 24.
Localización – Dónde está el restaurante Alfileritos 24
El local
El local es una antigua casa toledana y está dividida en dos partes: a la entrada tienes la taberna y en los pisos superiores el restaurante. Los dos sirven gastronomía española, con la diferencia de que la taberna está más orientada a picoteo y el restaurante a alta cocina y platos tanto nacionales como internacionales.
Nosotros íbamos pensando en picoteo para el almuerzo por aquello de emplear menos tiempo y aprovecharlo para visitas, pero cuando llegamos no había sitio en la taberna y sólo quedaba de casualidad alguna mesa en la zona de restaurante. Teniendo en cuenta que ese fin de semana se celebraban las Jornadas de la Tapa en Toledo, tuvimos mucha suerte. Si estás pensando en comer en su zona de restaurante es mejor que reserves porque este restaurante de Toledo es muy popular y se suele llenar.
Restaurante Alfileritos 24
Mientras subíamos por las escaleras hasta nuestra mesa, siguiendo al camarero, nos quedamos sorprendidos por lo bonito y original que era el restaurante. En el centro tiene un patio y el restaurante se sitúa a su alrededor con dos tipos de decoración diferenciadas: una rústica y otra de diseño. Nuestra mesa se encontraba en la zona rústica del segundo piso, junto a la barandilla, y era todo muy agradable y tranquilo en nuestro rincón, en el que además estuvimos solos durante todo el almuerzo. Por cierto el restaurante tiene ascensor para aquellos que tienen más dificultad en subir escaleras. 
Nuestra mesa en el Restaurante Alfileritos 24
Nuestro almuerzo en Alfileritos 24
En la carta descubrimos platos muy originales, con buena variedad de entrantes y platos principales de carnes y pescados. Nos costó decidirnos porque también había un menú degustación que nos llamaba mucho la atención. La balanza la inclinó el camarero al hacernos una sugerencia de un plato original de nombre impronunciable que decía estaba delicioso. No estaba en carta y era algo especial que habían preparado para ese fin de semana, así que no lo dudamos. Terminamos pidiéndolo, además de otro entrante y dos platos principales. 
Carta del restaurante Alfileritos 24
Entrantes
Con la bebida nos pusieron un aperitivo formado por dos conos rellenos de gamba y una especie de espuma de marisco. Estaban riquísimos.
Conos de gamba y espuma de marisco
Enseguida llegaron los dos entrantes, de los que nos gustó la presentación moderna de los platos. Aunque los dos tenían como ingrediente principal el atún, estaban preparados de manera diferente y no tenía nada que ver el uno con el otro. Eso sí, he de confesar que nunca imaginé comer en Toledo este tipo de platos tan atípicos en la cocina castellana.
Entrantes del restaurante Alfileritos 24
El primer entrante es el tartar de atún rojo. No todo el mundo se atreve a probar el tartar porque es una preparación de pescado crudo o carne cruda. En este caso el tartar estaba hecho de atún rojo picado sobre una base de algas y guacamole. Estaba muy bueno y a todos los fans del tartar seguro que les encanta. Es el entrante que más gustó a Antonio por ejemplo.
Tartar de atún rojo
En mi caso, aunque me gustó el tartar, me encandiló mucho más el otro entrante, el que había sido la gran sugerencia del camarero, el usuzukuri. Este plato de nombre tan complicado no es más que un tipo de corte de sashimi, un plato que mucha gente confunde con un tipo de sushi aunque no es exactamente lo mismo. El sashimi es un plato japonés que consiste en marisco o pescado crudo cortado fino, aunque no tan fino como en un carpaccio en el que las láminas son casi transparentes.
Este usuzukuri del restaurante Alfileritos 24 tenía como ingrediente principal el atún toro, el que dicen que es la mejor parte del atún y muy apreciado en la gastronomía japonesa. El atún toro tiene infiltraciones de grasa muy uniformes que dan un aspecto marmoleado y un sabor delicioso. El plato me pareció espectacular, sin duda lo que más me gustó de toda la comida.
Usuzukuri
Platos principales
En los platos principales elegimos uno de carne y otro de pescado. Antonio pidió chipirones y llegó un plato muy preparado y adornado que se llamaba exactamente chipirón de anzuelo sobre pisto de la abuela, crujiente de morcilla y pil pil en su tinta. Los probé y me parecieron riquísimos, aunque Antonio se queda con los chipirones de Cádiz.
Chipirón de anzuelo
Y mi plato principal era cochinillo, pero no el típico cochinillo que comemos en Segovia, sino un rulo de cochinillo con migas manchegas dulces y salsa reineta. La carne estaba riquísima, aunque me gustaron menos las migas y las uvas de acompañamiento. Hubiese cambiado las migas por un tercer rulo de cochinillo. 
Rulo de cochinillo
Y hasta aquí llegó nuestro almuerzo en el Alfileritos 24 de Toledo. No pedimos postre porque llegados a este punto ya estábamos llenísimos, así que pagamos la cuenta y reemprendimos camino por la preciosa ciudad de Toledo.
