Hoteles en Toledo: Hacienda del Cardenal
Toledo es una de las escapadas típicas que puedes realizar desde Madrid ya que se encuentra a tan sólo una hora del centro. Por ese motivo la había visitado unas cuatro o cinco veces, aunque todas ellas habían sido una visita de un día. Hace dos fines de semana esto cambió, y es que me moría de ganas de ver Toledo de noche y disfrutar de sus calles y edificios iluminados. Por ese motivo que pasamos pasamos sábado y domingo en Toledo.
Algunos datos del Hotel Hacienda del Cardenal
Historia del Hotel Hacienda del Cardenal
En origen este lugar fue un palacio toledano del sigo XVIII y una quinta de recreo, con el jardín rodeado por un tramo de la muralla árabe original del siglo XI. El edificio del palacio fue restaurado y convertido en lo que hoy es el Hotel Hacienda del Cardenal.
Jardín
Localización y cómo llegar al Hotel Hacienda del Cardenal
El Hotel Hacienda del Cardenal está muy bien situado, en el Paseo de Recaredo 24, a sólo dos minutos de la Puerta de Alfonso VI y a cuatro de la Puerta de Bisagra. El centro histórico lo tienes a quince minutos, y si no quieres ir subiendo las cuestas de las calles de Toledo, puedes utilizar una de escalera mecánica que se inicia al lado del hotel, que te transporta hasta la parte alta de la ciudad.
Localización – Dónde está el Hotel Hacienda del Cardenal
Te voy a explicar un dato de la entrada para que no tengas problemas para encontrar el hotel, ya que nosotros dimos varias vueltas antes de reconocerlo. El problema es que no ves el edificio del hotel como tal desde la carretera, sino que la entrada está en un arco de la propia muralla que cae más en el Paseo Merchán.
Entrada del Hotel Hacienda del Cardenal
Aparcamiento
Enfrente del arco de entrada hay un parking al aire libre con zona azul en el que nosotros no conseguimos aparcar porque es muy pequeño y estaba siempre ocupado. Muy cerca también hay un parking público subterráneo que cuesta 17 euros al día.
Otra opción es bajar hasta el Paseo del Circo Romano, una zona con bastante aparcamiento en el que nosotros sí conseguimos sitio. También es de zona azul, aunque lo bueno es que no se paga durante gran parte del fin de semana.
Precio
Cuando empecé a buscar hoteles para Toledo me sorprendió su altísimo precio, a pesar de buscar para finales de noviembre, temporada baja. Después de mucho buscar, nos terminamos decidiendo por este hotel porque no era de los más caros, y leyendo comentarios de hoteles, era uno de los que tenían mejor relación calidad precio. Su precio era 87,30 euros por noche, habitación doble sin desayuno.
En este enlace puedes reservar este hotel: reserva Hotel Hacienda del Cardenal.
Mi experiencia en el Hotel Hacienda del Cardenal
Jardín
El arco de entrada de la muralla nos llevó a un bonito y amplio jardín de estilo musulmán, que imagino sobre todo en primavera debe estar precioso con las fuentes y flores. Aunque en esta época no estaba florido, sí resultaba la mar de agradable.
Jardín
Jardín
Se anunciaba el restaurante y la bodega a la izquierda, y el hotel y la terraza a la derecha, así que tomamos este camino. Por cierto el restaurante Hacienda del Cardenal es muy famoso en Toledo. Sirve cocina tradicional y regional, tiene horno de leña y está especializado en asados de cochinillo y cordero.
Entrada al jardín
Lo peor para llegar hasta el hotel es que tienes que subir algunos escalones con el equipaje, pero lo compensa que estos escalones te llevan a caminar pegados a la Muralla de Toledo, hasta el punto que incluso te puedes asomar entre sus almenas. Es la muralla árabe original del siglo XI, y nos han contado que en este lugar está la única torre octogonal de la muralla.
Almenas de la muralla árabe original
Desde la muralla también se tiene una buena panorámica del jardín y de algunos de sus salones, en los que se organizan eventos y cocktails.
Salones
Salones
Junto a la muralla también está la zona de piscina. Lástima que no era época y estaba cerrada. Y antes de llegar al hotel nos encontramos con la terraza de estilo chill out.
Terraza
El edificio del Hotel Hacienda del Cardenal
Un antiguo palacio toledano del siglo XVIII es hoy el edificio del Hotel Hacienda del Cardenal. Se encuentra en la parte alta del jardín, frente a la terraza, coronado por el escudo familiar Lorenzana. En el interior de este edificio histórico puedes encontrar techos de madera, un salón de estilo neoclásico con chimenea, sillones de cordobán, mobiliario de época, obras de arte, mosaicos, grabados y utensilios de cerámica originales de los siglos XVI y XVII.
La escalera de acceso a la planta superior tiene una barandilla del siglo XVI y una réplica de la obra “Tormenta sobre Toledo” de El Greco.
Hall de hotel
Nuestra habitación en el Hotel Hacienda del Cardenal
Nuestra habitación era doble con dos camas unidas. Me sorprendió su decoración, imitando las camas con dosel, que me parecen que dan un toque mágico y romántico a la habitación. Durmiendo en esta cama me sentía como una princesa.
Cama
Cama
Además toda la habitación mantenía el mismo estilo histórico del resto del edificio. Por ejemplo, este armario totalmente decorado con estrellas de ocho puntas, la famosa estrella tartésica popularizada por Abderramán I.
Armario con estrellas de ocho puntas
Por lo demás, la habitación estaba bien equipada con televisión, teléfono, calefacción, aire acondicionado, secador de pelo y espejo de maquillaje. El baño era completo con estos amenities.
Amenities
Al día siguiente al despertar me asomé por la ventana buscando la muralla. Desde nuestra habitación se veía un pequeño tramo, aunque no pude fotografiarlo bien porque la ventana tenía un mosquitero.
Muralla desde la habitación
Lo mejor y peor del Hotel Hacienda del Cardenal de Toledo
En general el hotel me gustó bastante. Lo que más:
- Historia: me encantó el lugar histórico del hotel. Estar en un antiguo palacio, y sobre todo estar durmiendo casi en la muralla.
- Ubicación: está muy bien situado ya que está muy cercano al centro sin tener que entrar con el coche por las calles estrechas de Toledo. Y es fácil llegar a pie desde el hotel al centro, con las escaleras mecánicas.
- Tranquilidad: el lugar me pareció muy tranquilo, no se escucha ningún ruido y se puede dormir muy bien.
Y lo que menos me gustó del hotel:
- Aparcamiento: no es tan sencillo encontrar aparcamiento. Hay uno de pago, fuera del hotel, y el resto está algo más alejado.
- Equipaje: no es cómodo llegar con las maletas, por la lejanía a la que dejas el hotel, y porque una vez estás dentro del recinto, tienes que subir algunos escalones y una cuesta.
- Desayuno: no es que no me gustara el desayuno, sino que no me gustó que no estuviese incluido en el precio.
