Lavertezzo, el pueblo más bonito de Ticino

Si hace algunas semanas te hablaba de Foroglio, el pueblo más pintoresco de Ticino esta vez te voy a hablar de Lavertezzo, un pueblo también pintoresco y que para mí es el pueblo más bonito de Ticino. Pudiera parecer un comentario muy atrevido e incluso ambicioso, teniendo en cuenta que no conozco todos los rincones de Ticino. Pero entre las fotografías que había visto en Instagram y lo que yo había conocido, de verdad que eso es lo que me transmitió Lavertezzo. Sentí que en Lavertezzo conocí el paraíso.

Nuestra visita a Lavertezzo en el valle de Verzasca

Veníamos de visitar el pequeño y encantador pueblo de Corippo cuando entramos en Lavertezzo y nos encontramos con esta imagen. No pudimos más que quedarnos con la boca abierta.

Buscamos con gran ansia un lugar para aparcar y no fue hasta el final del pueblo cuando lo encontramos, un parking gratuito a apenas 300 metros. Está justo al lado de un puente especial del que os hablaré más adelante. Aparcamos, bajamos del coche y nos encontramos con esta otra vista tan fabulosa. Creo que ni siquiera la neblina deslucía el paisaje.

El río Verzasca

Si en Corippo ya nos había llamado la atención el color del río, aquí en Lavertezzo nos resultó aún más fascinante. El río Verzasca es conocido por sus aguas cristalinas de colores deslumbrantes. De verdad que es el agua más verde que he visto en mi vida. Hay quien le dice color azul turquesa y para otros color verde jade. Yo lo veía verde.

También son conocidas estas aguas por ser muy claras y limpias, hasta el punto de estar considerado el río más limpio del mundo.

Iglesia de Santa María de los Ángeles

Descendimos nuestros pasos hasta la Iglesia de Santa María de los Ángeles, una iglesia barroca del siglo XVI, aunque el campanario fue construido en el siglo XVIII. Al igual que la de Foroglio, estaba cerrada.

Cerca de la iglesia se puede ver el busto del religioso suizo Aurelio Bacciarini, nacido en Ticino y beatificado en 2008 por Benedicto XVI.

Las casas de Lavertezzo

En la parte trasera de la iglesia encontramos una especie de pasadizo que nos dio acceso a ver de cerca las típicas casas de piedra de Lavertezzo y sus jardines. Me encantaban sus tejados cubiertos de pizarra negra y sus chimeneas.

Río Carecchio y Cascada Victoria

Regresamos a la carretera inicial y cruzamos, esta vez a pie, el puente que antes nos había fascinado desde el coche. Nos encontramos algo de lo que no nos habíamos percatado antes, y es que había otro pequeño río, el riachuelo Carecchio con la pequeña Cascada Victoria.

Puente de los Saltos

Y ya llegados a este punto, no había mucho más que ver en Lavertezzo, así que emprendimos camino de regreso al coche sin olvidarnos del puente que nos habíamos dejado para el final.

Cuando aparcamos y vi que ahí estaba este puente, me dio muchísima alegría, porque había visto fotos suyas buscando artículos de Ticino y fotografías en Instagram, pero no había llegado a saber dónde se encontraba exactamente.

Tenía la esperanza de que mientras recorríamos el Valle Verzasca con el coche, el puente fuese fácilmente visible, pero lo que no hubiera imaginado es que estaría en el mismo Lavertezzo.

El nombre del puente en italiano es «Ponte dei Salti«, y se llama así porque hay muchos intrépidos que se lanzan al río desde el puente. No es demasiada altura pero tampoco es demasiado profundo el río, así que aunque cuando yo fui no vi a nadie tirarse porque hacía frío, me resulta sorprendente. Además a lo largo del río te encuentras carteles de aviso por las corrientes traicioneras del río Verzasca.

Seguramente no es necesario que os explique por qué tenía tanto interés en buscar el Puente de los Saltos de Ticino, ya que salta a la vista. Tiene una forma tan especial que es imposible que deje indeferente a nadie.

El Puente de los Saltos es un puente medieval de piedra del siglo XVII con un arco doble muy curvado y estilizado. El puente original fue destruido en unas inundaciones y éste es una reconstrucción fidedigna del puente original.

Si de algo nos dimos cuenta es de que desde luego este puente de Lavertezzo es la estrella del río Verzasca. Es donde encontramos más turistas, la mayoría italianos, y eso que era ya noviembre. Imaginamos que en verano debe estar muy masificado el puente, algo que no me haría nada de gracia si lo tengo que cruzar, porque puede resultar algo peligroso. Nosotros lo cruzamos y apenas había cuatro personas, y al cruzarnos con ellos o mientras ellos se hacían fotos o nosotros, se me pasó por la cabeza pensar: «Espero que no me den un culazo, porque me voy al agua». Y es que el borde del puente tiene una altura muy baja y no llega ni a la cintura, así que si te asomas te da sensación de que el cuerpo se te va a ir al agua. Una sensación que me daba miedo y me resultaba fascinante a la vez.

Por cierto, el puente nos regaló la vista más bonita y fascinante de Lavertezzo.

Ésta es la vista norte del río Verzasca desde el Puente de los Saltos.

Lavertezzo y los turistas

Por cierto, al hilo de lo que te he contado de los turistas en el puente, te diré que después de regresar de Ticino leí algunos artículos en los que decían que Lavertezzo es conocido como «Las Maldivas suizas». Y también que a raíz de un video de Capedit, un famoso videomaker y fotógrafo italiano, parece que le dio el apelativo de «Las maldivas de Milán» y provocó un estallido de turistas en Lavertezzo, con las consiguientes quejas de los suizos por el gran número de turistas, la suciedad que generaban y su falta de respeto por el medio ambiente.

Te dejo el video de Lavertezzo que se convirtió en un reclamo turístico: