Un paseo por Gibraltar, visitando el peñón inglés

Siempre que pienso en Gibraltar recuerdo un viaje que hice de pequeña con mis padres. En aquella época no se podía pasar de España a Gibraltar tan alegremente, y había enormes colas, así que decidimos ver Gibraltar desde la verja fronteriza. Nos acercamos tanto que enseguida vino un policía inglés a decirnos que nos alejáramos. Y ése fue mi único contacto con el peñón de Gibraltar durante mis primeros cuarenta años de vida.

Hace tres años, la cosa cambió. Fuimos a visitar a unos amigos en Tarifa, y aprovechamos una mañana para dar un paseo por Gibraltar. Lo visitamos a nuestro aire, sin hacer la ruta turística, y nos quedaron cosas por ver, como los monos de Gibraltar, pero al menos ya ponemos cara al famoso peñón. Y sobre todo, pude escuchar por mí misma aquello que me habían contado de que los habitantes de Gibraltar hablan un inglés andaluz.

Nuestra visita a Gibraltar

De Tarifa a Gibraltar

El viaje de Tarifa a Gibraltar en coche son poco más de cuarenta minutos por la carretera N-340, paralela a la costa mediterránea, en el sur de Cádiz. Todo el trayecto te regala unas vistas increíbles del mar Mediterráneo, y lo más sorprendente, también se ve la costa africana. Me emocionó porque nunca he estado en África, y sentirlo ahí tan cerca, me resultó fascinante.

En verdad sólo hay 14,4 kilómetros de distancia en el punto más cercano. Si te has preguntado alguna vez dónde está la distancia mínima entre España y África, está precisamente entre la Punta de Oliveros en Tarifa y la punta Cires en Marruecos.

Entrando en Gibraltar

La Avenida Principe de Asturias de La Línea de la Concepción, nos llevó hasta Gibraltar. Nos dio bastante alegría encontrarnos frente al peñón, y sentimos algo de nervios al cruzar la frontera. No sabíamos si habría muchos coches y nos tocaría esperar cola, si nos pondrían problema por algo. Pero al final fue bastante rápido. Había pocos coches de espera, sólo nos pidieron la documentación, y pasamos sin problema. ¡Qué emoción!

Aeropuerto de Gibraltar

Nada más cruzar la frontera nos encontramos en la Avenida Winston Churchill, que es la avenida principal de Gibraltar, dedicada al líder británico. A la derecha nos ofrece una vista muy bonita del mar Mediterráneo y del puerto de Gibraltar.

Y a la izquierda algo sorprendente que no había conocido nunca, y es que esta avenida cruza la pista del Aeropuerto de Gibraltar. De hecho leímos que cortan la carretera cada vez que una aeronave tiene que aterrizar o despegar. Así que es algo tan atípico, que no me extraña que hubiese turistas haciéndose fotos en la propia pista del aeropuerto.

Las cabinas telefónicas de Gibraltar

Cuando ya entramos en el núcleo urbano de Gibraltar, continuamos por las calles que parecían más principales, y en cuanto vimos un parking, entramos en él. Antes de conocer Gibraltar pensaba que serían apenas dos calles, y aunque sí podemos reducirlo a que las principales son una larga de bajada que bordea todo el peñón, y otra de subida, en verdad hay muchas más calles y casas de las que había imaginado.

Lo primero que me sorprendió encontrar durante nuestro paseo por Gibraltar fueron las famosas cabinas telefónicas inglesas. Pensándolo, es normal que sean igual que las cabinas de Londres, pero hasta ese momento no lo había pensado. No pude evitar entrar en una de ellas.

Plaza Grand Casemates

Desde el parking tomamos una de las calles que parecía llevar al centro de Gibraltar, y terminamos en la Plaza Grand Casemates, que es la plaza más grande de Gibraltar, y que fue lugar de ejecuciones públicas hasta mediados del siglo XIX. Hoy día se utiliza para temas mucho más alegres como son espectáculos, fiestas y vida nocturna. De hecho tanto la plaza como otras calles estaban engalanadas, ya que estaban conmemorando las fiestas del Día Nacional de Gibraltar que se celebra el 10 de septiembre.

También había una enorme pancarta que decía «Self-autodetermination is our right». Y es que en su fiesta nacional se conmemora el primer referéndum sobre la soberanía de Gibraltar, que se realizó en 1967, con el resultado que ya sabemos.

En la plaza también encontramos la estatua a las fuerzas de defensa de Gibraltar que representa un soldado de la Fuerza de Defensa de Gibraltar durante la Segunda Guerra Mundial, y está dedicado a todos los gibraltareños que sirvieron en el Cuerpo de Voluntarios de Gibraltar.

Main Street

Desde la plaza decidimos tomar una de las calles que nos pareció más principales, y acertamos plenamentemente, porque nos encontramos con la calle comercial principal de Gibraltar, una de las imprescindibles en todo paseo por Gibraltar. Main Street va desde la Plaza Grand Casemates hasta Plaza de John Mackintosh. Es un kilómetro de calle peatonal en la que encuentras edificios con mucha mezcla de estilos: andaluces, moriscos, británicos, y hasta genoveses y portugueses.

Entre los lugares de interés más importantes que encuentras en esta calle están el Tribunal de Justicia, la Capilla del Rey, o la Catedral de Santa María la Coronada, que es la catedral católica de Gibraltar.

Plaza de John Mackintosh

Desde Main Street también se accede a la Plaza de John Mackintosh, que es otra de las plazas más importantes de Gibraltar. En ella encontramos los edificios del Ayuntamiento de Gibraltar y el Parlamento de Gibraltar.

Hay un edificio que llama muchísimo la atención y que llman El Convento. Se trata de la residencia actual del gobernador de Gibraltar.

Bastión Sur

Al final de la calle nos encontramos con el Bastión Sur, que formaba parte de las fortificaciones de Gibraltar, y que fue construido por españoles en el siglo XVII con el nombre de Bastión de Nuestra Señora del Rosario.

Cementerio de Trafalgar

Cerca del bastión está este cementerio que conmemora la batalla de Trafalgar, donde la flota franco-española fue derrotada por la Armada Real británica. Son pocos los muertos en esta batalla que fueron enterrados en él, pero sí se utilizó para enterrar a los fallecidos por fiebre amarilla y otras batallas posteriores.

Los monos de Gibraltar

A partir de aquí comienza la subida para ver a los famosos monos de Gibraltar, aunque nosotros no los visitamos. De hecho ya encontrabas carteles pidiendo que no se les diera de comer. Me encantará conocerlos la próxima vez.

Catedral de la Santísima Trinidad

Antes de regresar al coche y dar por finalizado nuestro paseo por Gibraltar, visitamos la catedral anglicana de Gibraltar, muy llamativa con su fachada en blanco y amarillo, y arcos en estilo morisco.