Bloom de Salvador Bachiller, uno de los restaurantes más bonitos de Madrid
Tenía muchas ganas de cenar en el restaurante Bloom de Salvador Bachiller, desde que supe que esta cadena de zapaterías y complementos había instalado cuatro restaurantes en Madrid. El primero que visité fue el Jardín Secreto de Salvador Bachiller, una preciosa y romántica terraza al aire libre en la calle Montera. En esta ocasión iba a conocer el que dicen es el restaurante más bonito de Salvador Bachiller en Madrid: Bloom.
Restaurante Bloom de Salvador Bachiller
Qué significa el restaurante Bloom
El nombre Bloom, en inglés, significa florecer o floración. Y eso es lo que este restaurante te hace sentir, ya que es un auténtico paraíso de naturaleza y flores.
Dónde está el restaurante Bloom de Salvador Bachiller
Está ubicado en la calle Alberto Aguilera, 54. Esto es por la zona de Argüelles, en el distrito de Chamberí.
Entrada al restaurante Bloom
Fui a cenar con mi mejor amiga, porque teníamos algo importante que celebrar, y estábamos muy emocionadas de conocer juntas este lugar tan bonito. Enseguida identificamos la entrada al restaurante, porque es lo que más brilla de toda la calle Alberto Aguilera. Viendo estas flores rosas y el letrero luminoso Bloom, enseguida comprendimos que no llegábamos a un restaurante cualquiera.
Conociendo el restaurante Bloom de Salvador Bachiller
Habíamos reservado mesa para cenar a las 9 de la noche, y nos presentamos allí a las 8 porque imaginábamos que íbamos a hacer muchas fotos. Nuestras expectativas se vieron superadas, ya que encontramos más rinconcitos bonitos de los que habíamos imaginado.
Nada más pasar la entrada nos deleitamos con su terraza, cubierta y climatizada. Era una especie de porche con columpio, todo rosa, completamente decorado con flores, de aire romántico, y precioso.
Tras la terraza venía la famosa escalera con flores del restaurante Bloom. Como la había visto tantas veces en las publicaciones de Instagram, pensaba que no me iba a sorprender, y vaya si me sorprendió. Es aún más bonita de lo que había visto. ¿Cuántos fotos nos hicimos aquí? De verdad que no exagero si digo que decenas.
El restaurante
Bajamos la escalera del restaurante Bloom y llegamos al salón. Nos encontramos una mesa y un sofá florido y también rosado, super llamativo. Y ya después la zona de mesas en tonalidad rosa anaranjado.
Dicen que el salón del Bloom es de estado colonial. Desde luego me resultó muy armonioso y espectacular, como todo. Ésta fue nuestra mesa.
La carta del restaurante Bloom
Tienes platos individuales y para compartir, y lo que más me gustó es que la mayoría de sus platos no son clásicos, sino de cocina actual y nombres modernos. Yo que ahora estoy en fase de experimentación de toda la gastronomía que puedo, gocé un montón.
Algunos de los platos que puedes elegir son hamburguesa mexicana, lasaña de boletus, varios tipos de tartar y tatakis, carpaccio, pinchos de lomos de merluza o barquitas de pollo marinado, por mencionar algunos de ellos.
La verdad que a mí me apetecían todos. Elegimos un plato cada una, y los compartimos. El primero fue estas flautas de pollo crujiente acompañadas de salsa de mostaza y miel. Estaban riquísimas, y la presentación del plato increíble, con estilo mexicano.
Y en el segundo nos dejamos orientar por el camarero, amabilísimo, por cierto: el aperitivo del emperador. Me pareció completísimo, además de delicioso, con una cuidada selección asiática que incluía rollitos, saquitos, gyozas, tempura de langostinos y salmón marinado. Un plato sensacional.
Para beber tienen de todo, incluyendo sangría, pink lemonade, aperol spritz, copa de chandon spritz, sidra, y vinos de todos los precios, hasta Vega Sicilia. Nosotras pedimos dos tintos de verano, super bonitos y riquísimos.
Los postres tienen nombres muy sugerentes como golden choco kiss, suspiro de pasión, el tesoro de la isla o cabeza en las nubes. Nosotras elegimos el coulant de rosas bloom. Estaba delicioso, y el chocolate del interior bien fundido, como debe ser en un coulant.
Precio de la cena en el restaurante Bloom de Salvador Bachiller
Es cierto que mucha gente dice que el restaurante Bloom es caro, y no les falta razón, pero también es verdad que como ocurre en muchos otros restaurantes, que pagas por el lugar, su decoración, toda su belleza, y la fama que ha adquirido en estos últimos tiempos.
La cuenta vino en una cajita de madera con flores muy bonita, como no podía ser de otra manera. El precio de nuestra cena fue 67 euros, porque nos limitamos a una cena ligera de sólo dos platos, y éstos fueron los precios:
- Flautas de pollo: 20 €
- Aperitivo del emperador: 24 €
- Coulant de rosas bloom: 9 €
- 2 tintos de verano, cada uno a 7 €: 14 €
Yo me lo pasé tan bien y me gustó todo tanto, que volvería mañana mismo allí. ¿Y a ti te gustaría conocerlo?