Yemas de Santa Teresa, el dulce más típico de Ávila
En mi última visita a Ávila tuve la oportunidad de conocer muy de cerca las famosas Yemas de Santa Teresa. Con conocerlas, me refiero no sólo a comerlas, sino que tuvimos la oportunidad de visitar el lugar donde se inventaron las auténticas yemas de Santa Teresa. Allí nos contaron su verdadera historia, y hasta tuvimos la oportunidad de hacer nuestras propias yemas. ¿Quieres conocer más de estas famosas yemas de Ávila?
Las Yemas de Santa Teresa
Origen de las Yemas de Santa Teresa
Si alguna vez has estado en Ávila te habrás dado cuenta de que las yemas es una de sus señas de identidad e imprescindibles de su gastronomía. Tanto es así, que se ha convertido en uno de los típicos souvenir que nos llevamos de vuelta cuando visitamos la ciudad. ¿Pero sabes dónde se inventaron las Yemas de Santa Teresa?
El origen de las Yemas de Santa Teresa se remonta a hace más de 160 años. Fue en 1860 cuando el obrador Don Isabelo Sánchez creó y empezó a comercializar las primeras Yemas de Santa Teresa en su pastelería “La Dulce Avilesa”. Aunque parecía algo sencillo, unas simples bolitas hechas con yema de huevo y azúcar, tuvo mucho éxito, y ese éxito aún llega hasta nuestros días. Registró las yemas con el nombre de «Yemas de Santa Teresa», convirtiéndose en una marca registrada por él, y que hacía clara referencia a uno de los personajes más emblemáticos de Ávila, Santa Teresa de Jesús.
Pastelería donde se venden las Yemas de Santa Teresa
Hoy día el lugar donde puedes comprar las auténticas Yemas de Santa Teresa es la pastelería La Flor de Castilla, en la Plaza de Jose Tomé número 40 de Ávila. Es el mismo obrador que originariamente se llamó “La Dulce Avilesa” y que después de algunos años pasó a su nombre actual “La Flor de Castilla”, de la compañía Santa Teresa. Este obrador también fue convertido en centro gastronómico y lugar de tertulia de intelectuales, artistas y escritores abulenses. Se cuenta que algunas personalidades famosas como Camilo José Cela, Adolfo Suarez o Miguel Delibes frecuentaban aquellas tertulias.
La Flor de Castilla tiene una fábrica en la que se siguen haciendo las yemas a mano, siguiendo la receta tradicional de las Yemas de Santa Teresa que fue transmitida de padres a hijos.
Diferencias entre las Yemas de Santa Teresa y las Yemas de Ávila
Si das un paseo por Ávila verás que hay muchas otras pastelerías en las que muestran en sus escaparates Yemas de Ávila. Ésas, son otras yemas. La realidad es que las auténticas Yemas de Santa Teresa son las que venden en La Flor de Castilla, y las únicas que pueden llevar ese nombre, porque tienen la patente. Las otras, no pueden llamarse Yemas de Santa Teresa, y por eso acogieron la denominación de Yemas de Ávila.
La otra diferencia reside en los ingredientes. Todas estas yemas son parecidas, pero no pueden ser iguales. Las Yemas de Santa Teresa sólo llevan huevo y azúcar, y en las Yemas de Ávila añaden algún ingrediente más, como puede ser limón.
El jeroglífico de las Yemas de Santa Teresa
Algo en lo que no me había fijado hasta ahora es que cada caja de Yemas de Santa Teresa tiene un jeroglífico, que es su emblema y el que otorga el sello de autenticidad a las yemas. ¿Eres capaz de descifrarlo? Mira la imagen.
¿Has sido capaz de reconocer lo que representan esos dibujos? Por si acaso no lo has descifrado, te cuento que los dibujos y letras representan el nombre “Yemas de Santa Teresa, La Flor de Castilla”. Vuelve a mirarlo, ¿a que no era tan difícil?
Aquí tienes la explicación. Empecemos por la primera fila del jeroglífico:
- Ye
- + representa mas
- D sería de
- La estampa sería Santa Teresa
Si ahora lo lees, formas Yemas de Santa Teresa.
Ahora vamos a la segunda fila:
- El pentagrama es la representación de la clave LA
- El dibujo representa una flor
- d sería de
- El mapa representa Castilla La Vieja
De esta manera puedes leer La-Flor-de-Castilla.
Ahora ya conoces lo que representa el jeroglífico de las Yemas de Santa Teresa. Y ya lo sabes, si tu caja de yemas no tiene jeroglífico, ¡es que no son las auténticas!
Los diseños del jeroglífico de las Yemas de Santa Teresa
A lo largo de los años el jeroglífico ha ido evolucionando desde su diseño original hasta el que puedes encontrar en la actualidad. Hasta el momento ha habido cuatro diseños diferentes. Éstos fueron los tres primeros.
El primer diseño ya representaba la estampa de Santa Teresa junto a un mapa de Castilla La Vieja en el que aún pertenecían a ella Santander y Logroño.
En el segundo diseño de 1933 se incluye por primera vez el escudo de Ávila, y varía ligeramente la flor representada.
El tercer diseño es de 1964, con una ilustración de Santa Teresa obra de José Sánchez Merino y otro mapa de Castilla La Vieja donde ya pertenecen a ella Valladolid y Palencia.
El cuarto y diseño actual del jeroglífico de las Yemas de Santa Teresa conserva los elementos originales del acertijo, y se han añadido los datos de contacto de la pastelería. Éste se expone en un lienzo que puedes ver en el pequeño “Museo de las Yemas” de La Flor de Castilla.
Época de las Yemas de Santa Teresa
Las Yemas de Santa Teresa se fabrican y venden durante todo el año, aunque hay épocas en las que se consumen más especialmente, como puede ser la Navidad y Semana Santa.
Evolución de las Yemas de Santa Teresa
Durante esta última época moderna la pastelería ha evolucionado e innovado con algunas recetas nuevas de yemas en las que se incorporan otros ingredientes como chocolate, anís y ron, aunque las yemas más vendidas siguen siendo las tradicionales. He de decir que las probé y están también riquísimas. Yo en particular me quedaría con las de chocolate, una auténtica delicia.