Ruta por las aldeas históricas de Portugal zona norte

Siempre me encargo yo de organizar los viajes, y en esta ocasión mi compañero de vida decidió regalarme algo que no había tenido nunca: un viaje sorpresa. Sólo sabía que empezaba en Madrid y terminaba en Jerez, y que haríamos varias paradas.

He de reconocer que me resultó muy divertido porque durante las semanas anteriores me había ido dando algunas pistas, y me había tenido pensando y elucubrando durante mucho rato. Yo estaba convencida de que sería en el sur, y todo me llevaba a pensar que viajaríamos al Algarve. Me equivoqué completamente porque el destino del viaje fue una ruta por las aldeas históricas de Portugal y después Trujillo. Al menos acerté en el país.

Me encontré con una zona de Portugal de la que nunca había oído hablar, y muy histórica. La ruta está formada por doce aldeas históricas en las que se vivieron las mayores batallas entre España y Portugal, al ser fronterizas. Nosotros nos centramos en un recorrido circular en un día por los pueblos que estaban al norte. ¡Espero que te guste!

Ruta por las aldeas históricas de Portugal

Trancoso

El punto de inicio de nuestra ruta fue la localidad de Trancoso, un lugar que posee un bonito centro histórico amurallado y que te devuelve a la Edad Media. Su castillo milenario corona la ciudad y es lo primero que ves desde varios kilómetros antes de llegar. También tiene un barrio judío con la Casa del gato negro y su León de Judá.

Recorriendo las calles de Trancoso te das cuenta de la gran tradición religiosa de la región, ya que encuentras una iglesia a cada paso, y algunas de ellas son muy bonitas. También me resultó muy curioso el Crucero del Señor de la Buena Muerte, que es un crucero con porche, y cerca de él unas tumbas medievales grabadas en la roca.

También destacan varias plazas bonitas, una de ellas dedicada a su poeta más famoso, Bandarra. También gracias a pasear por Trancoso y al monumento que lo rememora, supimos que la española Isabel de Aragón se casó con el rey Dinis o Dionisio en el siglo XIII, y se convirtió en reina de Portugal.

Moreira de Rei

Éste es un lugar muy curioso cercano a Trancoso. Paramos en él porque leímos que albergaba las ruinas de un castillo medieval, aunque tienes que poner mucha imaginación para verlo. El lugar me gustó, y desde él tienes unas vistas alucinantes. También tiene un par de iglesias importantes, una de ellas que estaba en completa restauración durante nuestra visita, tumbas grabadas en la roca, y la famosa picota que encontramos en todos estos pueblos, similar a la que existe en muchos pueblos castellanos.

Marialva

Tiene dos zonas claramente diferenciadas. En la parte baja encuentras la parte moderna, con plazas amplias y algunas viviendas que me recordaban a las casas castellanas, como las de Calatañazor por ejemplo. Aquí hacen vida los abuelos de Marialva, muy simpáticos por cierto, ya que no dudaron en ofrecerse a ayudarnos a encontrar lo que necesitásemos. También había muchos gatos.

En la zona alta de la localidad te encuentras con la ciudad antigua, en la que puedes disfrutar de un maravilloso paseo entre calles con mucho encanto que te llevan hasta la fortaleza. Te recomiendo que rodees la fortaleza por todos los lados que puedas ya que descubrirás rincones maravillosos; mi favorito, el camino que te lleva hasta la Capilla de Santa Bárbara, desde la que puedes contemplar una panorámica completa de la ciudad baja de Marialva.

Reserva Natural de Faia Brava

El camino entre Marialva y Castelo Rodrigo nos regaló unas vistas impresionantes por la sierra portuguesa, que atravesaba la Reserva Natural de Faia Brava. La parte más alucinante apareció en el cañón del río Côa. Para atravesar el Ponte da Uniao, tienes un descenso y ascenso vertiginoso por una carretera en zigzag con desniveles del veinte por ciento.

Castelo Rodrigo

Posiblemente es el pueblo que más me gustó de la ruta por las aldeas históricas de Portugal zona norte, por varios motivos. Por un lado, porque cuando entramos en la ciudad moderna vimos al fondo en alto la fortaleza, y me resultó muy impresionante. Por otro, porque desde que atravesamos la Puerta del Sol, una de las tres entradas a la ciudad amurallada de Castelo Rodrigo, sentí que estaba en otra época, y todo lo que encontré de la ciudad histórica está muy cuidado.

Su rincón más espectacular es el Palacio de Cristóbal de Moura, que lo mandó construir en el mismo lugar en el que se encontraba la antigua alcazaba. Aunque está en ruinas, me resultó fascinante explorar todos sus rincones, y contemplar toda la llanura desde él. Otras de las visitas imprescindibles de Castelo Rodrigo son la Torre del Reloj y la picota manuelina.

Almeida

Es la que tiene la fortaleza más sorprendente de la ruta por las aldeas históricas de Portugal, o al menos de las que yo he conocido. Cuando atraviesas la entrada principal y te das cuenta de que toda la ciudad está dentro de la ciudadela, es fascinante. Tiene forma de estrella con 12 puntas; si puedes busca una foto aérea de Almeida y me entenderás.

Por lo demás, puedes recorrer las calles de Almeida y disfrutar de ellas, porque de verdad que es una delicia. Tiene unas puertas de entrada muy bonitas, puedes recorrer la ciudadela donde encontrarás cañones y vestigios de la Guerra de la Independencia contra los franceses, y subir hasta las torres que se ven desde la lejanía, donde destaca la torre del reloj. Bonito, ¿verdad?

¿Conoces la ruta por las aldeas históricas de Portugal? ¿Cuál es tu aldea favorita, y por qué?