Así viví en Laponia mi primera experiencia con la aurora boreal
Si tuviera que hacer una recopilación de las experiencias más emocionantes de mi vida, sin duda la aurora boreal sería una de ellas. Aquella noche en Tankavaara nos acostamos con un subidón increíble, y aún recuerdo las ganas irrefrenables de buscar un punto wifi para contarlo a todo el mundo. Había sido mucho más espectacular de lo que había imaginado.
Hoy os cuento cómo viví la primera aurora boreal de mi vida, ¡qué momento tan feliz!
Así fue como viví mi primera aurora boreal
18:00 – Nos preparamos para cazar la aurora boreal
Desde que pusimos un pie en Laponia, todos los días estábamos pendientes del tiempo. Sabíamos que si el cielo estaba nublado, o aún peor, nevaba, no veríamos la aurora boreal. Eso había ocurrido las cinco noches anteriores. Pero hoy era diferente, el cielo estaba despejado, y los lugareños tenían buen presentimiento. Además, las aplicaciones de «Aurora Forecast» decían que había grandes probabilidades de aurora boreal a partir de las siete de la tarde en nuestra zona, Tankavaara.
Durante la tarde estuvimos inspeccionando el territorio para que cuando llegase la hora tuviésemos claro dónde posicionarnos. También preparamos el equipo fotográfico, y sobre todo, nos abrigamos muy muy bien. No sabíamos cuánto duraría la espera, pero estando a unos -12 grados, el frío estaba asegurado.
19:00 – Esperando a la aurora boreal
A las siete de la tarde ya nos dirigimos al lugar elegido. Habíamos optado por un lugar solitario, para no entorpecernos con otros cazadores de auroras boreales, y como sólo había casas y árboles, preferimos internarnos en el bosque. El camino estaba completamente nevado, con una profundidad de la nieve que pasaba del tobillo, y no se veía absolutamente nada. Llevábamos una linterna de cabeza que nos permitió al menos saber por dónde pisábamos.
Elegimos un claro en el bosque que nos permitía divisar perfectamente el cielo al mirar hacia el norte. Preparamos trípodes y cámaras. No había ni un alma, ni un sonido, y estaba tan oscuro y solitario que hasta daba miedo. Se nos pasó por la mente que podía aparecer algún animal. Nuestro temor se diluyó al fijarnos en el cielo, con más estrellas de las que nunca en la vida habíamos visto, y de una nitidez pasmosa. También nos llamó la atención la presencia de una nube gigantesca y luminosa. Y decidimos hacer una fotografía…
Estrellas previas a la aurora boreal
Al ver la foto en el visor de la cámara nos quedamos pasmados, ya que se detectaba claramente una zona verdosa. En ese momento nos percatamos de que lo que creíamos una nube luminosa, en realidad escondía la aurora boreal, y además estaba muy cerca de nosotros. Empezamos a sentirnos muy contentos a la vez que nerviosos. No sabíamos cuánto duraría, si iría a más o menos, y de qué color la veríamos. Me llamaba la atención que ante nuestros ojos se mostraba blanca y en la cámara sí se veía verde. Y continuamos sacando fotos.
19:30 – Aparece la aurora boreal
Tras media hora haciendo fotos en este lugar, decidimos buscar otro paraje, y nos trasladamos a la calle principal del poblado western de Tankavaara. Fue ahí cuando comenzamos a diferenciar cada vez mejor un haz de luz que de repente estaba transversal, y al instante vertical.
20:30 – Apogeo de la aurora boreal
El momento más exultante de la noche comenzó cuando la luz se fue volviendo cada vez más intensa, y muy verde, también ante nuestros ojos. Parecía que en el polo norte habían colocado un faro gigantesco, y su luz no paraba. Lo mismo se mostraba recta como parecía dibujar una especie de remolino.
Pero lo mejor de la noche estaba por llegar. La aurora boreal comenzó a envolvernos, ocupando todo el espacio. La teníamos sobre nuestras cabezas, al frente, detrás, se alargaba, se ensanchaba, se multiplicaba en varios halos de luz que formaban semicírculos sobre nuestras cabezas. Girábamos 360 grados y todo lo que veíamos era aurora boreal; una aurora boreal que no paraba, estaba como enloquecida, moviéndose rápidamente por todo el cielo.
Recuerdo que en un momento comenzamos a pensar que nos faltaban ojos, cámaras y manos, para captar todo lo que estaba ocurriendo en esos instantes. También empezó a aparecer gente, que hasta ese momento debían estar escondidos en sus cabañas. Se sentía la emoción en el ambiente. Todos estábamos eufóricos presenciando las luces del norte.
21:00 – La aurora boreal se calma
Tras media hora de aurora boreal en su máxima plenitud, llegó la calma. Las luces del norte fueron perdiendo intensidad, y sentimos que todo había terminado. En realidad la aurora boreal se seguía viendo, pero de una forma tan tenue, que ya parecía poco importante.
Y llegó el momento de comentar y compartir lo que habíamos sentido. Unos finlandeses nos dijeron que había sido una de las auroras boreales más bonitas que habían visto, y que además habíamos tenido una suerte inmensa, porque hacía dos semanas que no la veían. Nos sentíamos muy, muy felices.
Con la aurora boreal ya prácticamente inexistente, decidimos volver a nuestra cabaña. Continuábamos exaltados, y necesitábamos contarlo. Como en la cabaña no había wifi, fuimos hasta el bar, y allí se lo conté a todo el mundo por whatsapp, además de poner mi primer tweet sobre la aurora boreal.
En él se puede sentir mi emoción y mis ganas de ver las fotos que habíamos hecho. No fue hasta dos días después cuando pude subir mis primeras fotos de la aurora boreal.
22:30 – La aurora boreal renace
Volvíamos del bar cuando nuevamente vimos una luz verde en el horizonte, ¡la aurora boreal había vuelto! Corrimos a la cabaña para coger de nuevo cámaras y trípodes, y nos colocamos en el primer sitio que pillamos, entre las cabañas.
Esta segunda aurora boreal no fue tan espectacular como la primera, pero aún así nos dejó unos momentos increíbles durante los veinte minutos que duró. A partir de aquí volvió a desaparecer, y aquella noche ya no volvimos a verla. Eso sí, regresamos a la cabaña tan entusiasmados, que nos dio la madrugada hasta conseguir coger el sueño, pensando en si volveríamos a ver las famosas luces del norte alguna de las noches que nos quedaban en Laponia. Esperábamos volver a verlas, y si no era así, desde luego teníamos claro que planificaríamos otro viaje al norte de Europa para buscarlas, porque una experiencia así, hay que repetirla una y mil veces.
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Hola buenos dias soy Mario Peco y me an consejado en el blog de la gran escapada ( Eli y Mar ) que me pusiera en contacto con vosotros para a ver si me pudierais dan algunos consejos. Somos una familia de tres adultos y dos niños que vamos a viajar a utjoski el proximo mes de Marzo del 1 al 5 pero queremos hacer la caza de Auroras por nuestra cuenta por que para ser sincero los precios que tienen las empresas que se dedican a esto nos parece una pasada. Por eso os mando este correo para ver si me podeis ayudar dandome unos buenos consejos. Muchas gracias un Saludo.
Buenas tardes Mario. Creo que en Utjoski será fácil que veais la aurora boreal porque estáis muy al norte, si el tiempo acompaña claro. Si hay nubes, llueve o nieva es más complicado, pero con el cielo despejado, tenéis bastantes probabilidades. Os aconsejo que os instaleis en el móvil alguna de las aplicaciones que existen, como Aurora Forecast, así tenéis idea de la franja horaria en la que pueden aparecer.
Tenéis que buscar un sitio si contaminación lumínica, un bosque por ejemplo, y esperar a que aparezca. Además hay que tener mucha paciencia, porque en algunos casos hay que estar horas hasta que aparece.
Si necesitas algo más específico, coméntame!!
Un saludo!
Hola Carolina!
Me ha encantado tu post. Estas Navidades viajaremos a Rovaniemi. Uno de los sueños de mi marido es ver auroras boreales, así que espero tener suerte…
Una pregunta, en caso que en Rovaniemi no veamos, iremos a Tankavaara en coche. Exactamente ¿ por dónde deberíamos ir bajo tu opinión? Algún lugar que podamos indicar en el gps y podamos dejar el coche?
Muchas gracias!
Un saludo
Silvia
Hola Silvia!
Lo primero muchas gracia, me alegra que te haya gustado. Ya veréis qué sorprendente es Laponia.
Sin duda yo haría noche en el Tankavaara Gold Village. Es perfecto para ver la aurora boreal. Te dejo el enlace donde yo me alojé: https://www.booking.com/hotel/fi/tankavaara-gold-village.es.html?aid=872409
Si necesitas algo más, escríbeme sin problema. Gracias!
Saludos!
Muchísimas gracias Cristina!
Espero tener suerte!
Un saludo.
Silvia
Ya me contarás a tu vuelta. Gracias a ti!
¡Hola!
No me vas a creer pero se me ha puesto la piel de gallina leyendo el post.
Creo que debe ser una experiencia tan alucinante poder ver la aurora boreal, que ningún mortal deberíamos renunciar a poder verla en directo alguna vez en la vida. Vamos, que sin duda entre mis sueños, espero que sea de esos que se cumplen, es poder verla con mis propios ojos en directo.
Sinceramente, has sabido narrar tan bien el post, que cualquiera que lo lea puede imaginarse a la perfección, o casi, porque si no lo vives creo que ni se puede imaginar una lo que se siente… Pero a lo que me refiero es que el haberlo narrado con todo detalles, la preparación, la espera, cuando sale, se calma y renace, sinceramente me ha encantado. Cierto es que he leído posts y he visto vídeos sobre ella, pero ninguno había conseguido tanta cercanía, por lo que te felicito por ello.
He leído que el mejor lugar para verla son las zonas septentrionales de Noruega ¿es verdad?
Besotes
Hola Carolina! Muchas gracias por tus palabras, me sonrojo 😛
La verdad que es una de las experiencias más magníficas que he vivido. De verdad que es imposible describir lo que se siente. Recuerdo aquella noche, con la aurora boreal envolviéndonos y sin parar de moverse, que parecía algo de otro planeta. Y lo que hayas visto en video no tiene nada que ver con ver una buena aurora boreal en vivo. Y digo una buena, porque la que yo vi esa noche me dijeron que era una de las mejores de las últimas semanas. Al día siguiente vi otra, y aunque fue bonita, no nos envolvió igual, y las sensaciones no fueron las mismas.
Tienes razón, el lugar típico es Tromso en Noruega, yo no he estado, pero me han contado que allí tienes mucha mayor probabilidad de verlas, y también que está masificado, y tienes más complicado encontrar un rincón tranquilo.
Saludos Carolina, y de nuevo gracias!