Ruta por el Lago de Como de un día

Hay lugares en el mundo que pensaba nunca iba a conocer por ser muy exclusivos y uno de ellos era el Lago de Como, un lago del que había escuchado sólo 2 cosas: que era precioso y que era el favorito de multitud de actores, cantantes y políticos, que tenían impresionantes mansiones allí. Por todo eso yo me había imaginado que una ruta por el Lago de Como sería algo inalcanzable. Así que nunca me planteé viajar hasta allí y yo no elegí viajar al Lago de Como, pero sí el Lago de Como me eligió a mí.

El destino quiso que tuviese que ir dos semanas seguidas a Suiza por trabajo, a lugares diferentes. El primer viaje al cantón de Ginebra y el segundo al cantón de Ticino. En lugar de regresar el fin de semana a España, lo aprovechamos para hacer el traslado de un cantón al otro de Suiza y de paso hacer algo de turismo.

Nuestro viaje por el Lago de Como

Viaje desde Ginebra hasta el Lago de Como

El viernes dejamos Ginebra. El viaje de Ginebra a Ticino duraba entre 4 y 5 horas dependiendo de la ruta y de si cruzabas o no peajes. Nosotros decidimos salir por el sur de Ginebra hacia Francia e Italia porque nos hacía ilusión atravesar los Alpes. Cruzamos por el túnel del Mont Blanc y fue emocionante, ¡era el mítico Mont Blanc!

Después del Mont Blanc, entramos en Italia por el Valle de Aosta, un lugar que nos resultó de una belleza extrema y en el que en cada pueblo destacaba la torre de una iglesia o un castillo. Tras dos horas de viaje por Italia, pasamos cerca de Milán y llegamos al hotel Cruise en Lucino, un hotel cerca de Como, a sólo 15 minutos. Nos pareció muy buena opción para dormir barato en el lago de Como sin pagar los precios de sus alojamientos, que son muy altos. Para que te hagas a la idea, pagamos la noche a 95 euros cuando el hotel más barato en el lago de Como era desde 200 euros hasta precios del doble y mucho más altos.

Nuestra ruta por el Lago de Como

Como

Habíamos preparado una ruta que pasaba por los pueblos más bonitos del lago de Como, pero como sólo teníamos un día no teníamos claro si nos daría tiempo a visitarlos todos. De momento hicimos la entrada en el lago por Como, la ciudad más importante del Lago de Como y que da nombre al lago.

Nos pareció una ciudad muy bonita, con varias iglesias impresionantes como el Duomo y un paseo marítimo de vistas increíbles a orillas del Lago Como. También nos pareció una ciudad con mucha vida, ya que además era día de mercado. Y lo único negativo es que había demasiada gente, demasiado tráfico, estaba imposible aparcar y resultaba agobiante. Así que hicimos visita panorámica de Como y continuamos camino con idea de adentrarnos en el Como más solitario.

Viaje en coche de Como a Bellagio

Abandonamos Como con dirección a Bellagio y todo el camino fuimos por una carretera estrecha que bordeaba el lago y con continuas subidas y bajadas por los montes del lago Como. No sólo encontramos el Como más solitario sino también el Como con más encanto. Los paisajes del lago que se mostraban ante nuestros ojos eran increíblemente bonitos y espectaculares. No pudimos parar donde vimos las vistas más bonitas porque hay bastante escasez de miradores en el Lago de Como, de hecho en este viaje sólo encontramos dos, uno con vistas muy ocultas del lago y éste otro que sí tenía unas vistazas increíbles, el mirador del Ristorante Il Pescatore.

Nos llamó la atención que durante el recorrido encontramos muchísimos ciclistas. Y en un momento del viaje estuvimos largo rato detrás de un autobús. Fue muy curioso porque iba pitando en cada curva para avisar a los coches que venían en sentido contrario de que él estaba allí y así evitar un posible choque. La carretera era tan estrecha que en algunos momentos no cabía el autobús y otro coche, e incluso hubo momentos en que terminamos «encajonados» y algunos coches tuvieron que dar marcha atrás.

Bellagio

Habíamos leído que Bellagio era una de las visitas imprescindibles en el Lago de Como y estuvimos de acuerdo nada más poner un pie en ella. Precioso contemplar desde la zona alta sus callecitas estrechas y llenas de vida desde las que puedes adivinar al fondo el lago. Por todo ello Bellagio es uno de los pueblos con más encanto del Lago de Como.

También Bellagio es de los más animados del lago, en parte por su situación en el ángulo de la Y invertida que forman las aguas del lago, lo que le hace ser el punto de salida de los ferries que parten hacia Cadenabbia y Varenna. Bellagio además de preciosa tiene un gran ambiente con gente que va y viene en los ferries y multitud de tiendas y restaurantes en los que puedes disfrutar de fabulosa comida a orillas del lago.

Ferry de Bellagio a Cadenabbia

Ya te he contado mil veces que adoro los paseos en barco y me encantó poder cruzar parte del Lago Como en ferry. Hay rutas en barco por el Lago de Como de varias horas, pero en nuestro caso sólo queríamos trasladarnos para continuar nuestra ruta en coche por el Lago Como, así que fueron apenas diez minutos en los que disfruté con gran intensidad de todas las vistas del lago desde que abandonamos Bellagio hasta amarrar en Cadenabbia.

Menaggio

El ferry nos dejó a menos de 4 kilómetros de Menaggio así que llegamos enseguida. En Menaggio la odisea fue aparcar, ya que no había nada, ni siquiera aparcamiento de pago. Justo cuando ya nos estábamos desesperando encontramos una plaza libre. Este pueblo marinero no es tan encantador como Bellagio pero sí es agradable para un paseo. Lo más destacable son sus dos iglesias y las vistas panorámicas de Varenna desde el paseo marítimo.

Argegno

El destino final en nuestra ruta por el Lago de Como iba a ser el Balcón de Italia, y para llegar hasta él decidimos pasar por Tremezzo, que era otro de los pueblos importantes del Lago de Como aunque decidimos no parar ya que era algo tarde y no vimos nada que nos llamara la atención. Parece que su fama se debe sobre todo al palacio Villa Carlotta que perteneció a una antigua princesa prusiana.

Sí nos llamó bastante más Argegno, lo primero por el campanario de su iglesia y lo segundo por su carretera en zigzag que nos fue dando en cada curva una vista cada vez más espectacular del Lago Como.

Balcón de Italia

En media hora desde Argegno llegamos hasta el Balcón de Italia, un mirador en el monte Sighignola a 1300 metros de altura sobre el nivel del mar, con tan mala suerte que había caído la niebla y no se veía prácticamente nada. Dicen que en días soleados se ven unas vistas increíbles del Lago de Lugano. Yo me tuve que conformar con adivinar las casas de Lugano tras la niebla y también el puente de Melide.

Con la visita a este mirador dábamos por finalizada nuestra ruta por el Lago de Como de un día.