Frankfurt en un fin de semana. Qué ver y qué hacer en dos días
Mi relación con Frankfurt viene de lejos, desde 2002 en que subí a un avión por primera vez. Aquella vez viajé por trabajo en un vuelo de Lanchile Madrid-Frankfurt, aunque mi destino final era Bielefeld. Años más tarde volví a viajar unas cuantas veces más a Frankfurt, aunque siempre era una parada en mi camino, esta vez a Mannheim. No fue hasta hace dos fines de semana en que Frankfurt se convirtió en mi destino final, pude disfrutar de ella, y ahora sí puedo decir, por fin, que conozco Frankfurt.
Su nombre completo es Frankfurt am Main, por el río Meno que lo atraviesa, Main en alemán. Frankfurt, como la mayoría de ciudades alemanas, fue destruida por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, así que tuvo que ser reconstruida casi en su totalidad, y afortunadamente decidieron mantener su diseño original. Hoy día es una mezcla de ciudad antigua y moderna, ya que por un lado tiene un casco antiguo típico alemán, y por otro un centro de negocios formado por rascacielos que dominan la fisonomía de la ciudad y que la han convertido en la capital financiera de la Unión Europea.
Te invito a un recorrido por Frankfurt en un fin de semana. Espero que después de leerme te mueras de ganas de viajar hasta allí.
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Rascacielos de Frankfurt desde el Puente Antiguo
Ruta por Frankfurt en un fin de semana
Día 1 en Frankfurt
Edificio IG Farben o IG-Farbenhaus
Si llegas la tarde del viernes a Frankfurt, puedes comenzar con la visita a este edificio, que aunque no es uno de los lugares más comunes a visitar en Frankfurt, a mí me pareció una visita muy atípica y curiosa. Lo que más nos divirtió de este lugar fue buscar unos ascensores que están funcionando de manera continua como si fuera una noria. Se llaman ascensores paternóster y para subir a ellos tienes que saltar, ya que nunca paran. Fue una pena no poder verlos en funcionamiento, por no poder ir el viernes. Sólo funcionan entre semana, hasta las 10 de la noche, ya que en la actualidad es universidad, y depende de los horarios de los estudiantes. Habría sido una auténtica pasada ver saltar a los estudiantes dentro del ascensor.
Además de estos ascensores, el edificio IG Farben es tristemente célebre por haber sido la sede de la industria química IG Farben, conocida entre otras cosas por producir el gas Zyklon B que se utilizó en las cámaras de gas de los campos de concentración nazis.
Ascensores paternóster del edificio IG Farben
Día 2 en Frankfurt
Puente Antiguo o Alter Brücke
Es el puente más antiguo de Nuremberg, y desde la Edad Media hasta mediados del siglo XIX, fue el único puente de piedra en el curso inferior del río Meno. Más allá de su importancia histórica, desde este puente hice la foto que encabeza este artículo. Creo que sobran las palabras.
Catedral de Frankfurt o Kaiserdom
Desde el Puente Antiguo, un agradable paseo por la ribera del río Meno nos acerca hasta la colegiata de San Bartolomé, más conocida como la Catedral Imperial de Frankfurt. Fue construida en el siglo XIII y fue muy importante durante el Sacro Imperio Romano Germánico.
Su torre gótica también domina el cielo de Frankfurt con sus 95 metros de altura. Además puedes subir a ella, hasta el metro 66, gracias a 328 escalones agotadores. La escalera de caracol es estrecha e incómoda, de ésas en las que cuando te cruzas con alguien que baja mientras tú subes o viceversa, es toda una odisea. Sin embargo todos los esfuerzos se ven recompensados al contemplar las vistas de la ciudad de Frankfurt desde las alturas y a 360 grados.
Puente de Hierro o Eiserner Steg
Este puente peatonal tan transitado es una arteria muy importante de comunicación entre el centro histórico y otro de los barrios más bonitos de Frankfurt, Sachsenhausen. Además proporciona unas vistas magníficas tanto de la panorámica del río Meno como de la zona moderna de rascacielos. Como es ya un clásico en los puentes, está repleto de candados de enamorados.
El puente es una construcción de hierro forjado del siglo XIX, en estilo neogótico. Quedó muy dañado durante la Segunda Guerra Mundial y en su reconstrucción posterior aprovecharon para añadir además un ascensor, algo que no recuerdo haber visto en ningún otro puente. También tiene una inscripción en griego que aún no he logrado descifrar, y en la pared junto al ascensor y escaleras se encuentran marcas con la altura y fecha de los caudales máximos del río.
Puente de Hierro o Eiserner Steg
Plaza Römerberg
Fue la antigua plaza del mercado durante la Edad Media, y es de esos lugares que se quedan para siempre en tu retina. Sus preciosas casas de entramado de madera y tejados a dos aguas fueron destruidas durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Se reconstruyeron manteniendo por completo su estilo original, y gracias a ello hoy podemos disfrutar de la belleza de esta plaza, con su arquitectura tradicional alemana. Adonde se dirija tu mirada, te emocionará.
Entre sus edificios más llamativos está el Ayuntamiento, con su preciosa fachada. También tiene un bonito patio interior con escalera de caracol de arenisca roja labrada. Se puede llegar hasta la Sala del Emperador dentro del Ayuntamiento, aunque yo en particular descartaría esto último ya que sólo aloja retratos de sus gobernantes. He de confesar que después de pagar, me sentí bastante decepcionada. Sí recomiendo acceder a la Antigua Iglesia de San Nicolás o Alte Nikolaikirche.
Si puedes visitar la plaza fuera de las horas de máxima afluencia, disfrutarás mucho más, ya que durante el día está tan concurrida que te puede impedir disfrutar de toda su esencia. Por la noche también está espectacular, y en Navidad colocan aquí un mercado navideño, lo que hace que la plaza tenga aún más encanto.
Mercado Kleinmarkthalle
Nos encontramos de casualidad con este lugar, y nos cautivó encontrar grupos de amigos que charlaban copa de vino en mano, alrededor de puestos de bebida y comida local. Nos llamó la atención dos cosas. La primera, que todo, pero todo el mundo, estaba bebiendo vino, y siendo Alemania resultaba sorprendente que ninguno bebiese cerveza. También, que llenaban las copas de vino hasta arriba, prácticamente hasta el borde de la copa.
Por supuesto entramos dentro del mercado, ya que nos encanta saber qué compran los habitantes locales. Encontramos todo tipo de puestos de comida y se veía todo delicioso. También nos sorprendió encontrar el Arkade, un bar de tapas en Frankfurt, que tiene por logo al Quijote, y en la decoración un toro, guitarra española y sombreros flamencos. Todo muy típico y tópico, y servían los platos de la gastronomía española que más gustan en Alemania.
Calle Zeil y centro comercial MyZeil
La calle más comercial de Frankfurt es Zeil, y en ella encontramos un centro comercial diseñado por Massimiliano Fuksas que tiene una estructura de cristal espectacular. Si subes a la última planta, podrás observarlo en todo su esplendor.
Torre de Eschenheim o Eschenheimer Turm
Esta torre medieval fue una antigua puerta que formaba parte de la fortificación de la ciudad durante la Edad Media. En la actualidad se ha convertido en un bar y restaurante de gastronomía local, donde destacan sus carnes a la piedra, los flammkuchen y su gran variedad de cocktails.
Casa de Goethe
El autor de «Fausto» y «Werther», que es además uno de los escritores más importantes de Alemania, nació y vivió en Frankfurt. Su casa natal fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial, pero pudo ser restaurada completamente y hoy día se puede visitar. Recorriendo sus habitaciones puedes sentir la situación acomodada de la familia de Goethe. En la casa natal de Goethe puedes encontrar muebles originales, un teatro de marionetas, obras de arte, libros, y las habitaciones donde Goethe nació y escribió algunas de sus novelas.
Museo Städel
En Frankfurt encontramos uno de los conjuntos de museos más significativos de Alemania y Europa, en la Ribera de los Museos del río Meno o Museumsufer. Son un total de 15 museos de primer nivel dedicados a diferentes artes. Todos ellos merecen una visita, pero como nuestro tiempo era limitado, optamos por elegir el que nos parecía uno de los mejores museos de Frankfurt, el Museo Städel.
El Museo Städel nos sorprendió mucho más de lo esperado, y aunque es grande, tiene un tamaño perfecto para poder recorrerlo sin cansarte ni resultar monótono, ya que cada sala es diferente a la anterior. Alberga una de las colecciones más importantes de Alemania, con miles de pinturas, esculturas, fotografías, dibujos y grabados, y abarca desde el siglo XIV hasta nuestros días. Son muchas las obras que destacan en este museo, de artistas tan reconocidos como Botticelli, Rembrandt, Rubens, Caravaggio, Durero, Munch y Monet entre otros muchos. Además también expone una pequeña muestra de obra española, con un Picasso, un Murillo y un Velázquez.
Tras la visita a la exposición, recomiendo tomar uno de los caminos que salen a derecha o izquierda en el jardín, hasta la parte trasera del edificio, ya que es muy fotogénico, sobre todo cuando es de noche. Yo lo visité en plena hora mágica, y así de increíbles quedaron los colores.
Paseo nocturno por Frankfurt
Cuando hayas finalizado todas tus visitas diurnas en Frankfurt, te recomiendo un paseo por la orilla del río Meno, para contemplar sus puentes y rascacielos iluminados. Nosotras al salir del Museo Städel, en plena hora mágica, nos encontramos con esta vista tan fascinante.
Rascacielos de Frankfurt de noche
Día 3 en Frankfurt
Antiguo cementerio judío
El antiguo cementerio judío de Frankfurt no se puede visitar en sábado por ser shabat, así que es una visita perfecta para comenzar el domingo. Para acceder a él primero tienes que acercarte al Museo Judío que está al lado, donde te prestan la llave del cementerio sólo a cambio de dejar como fianza un DNI o pasaporte. Además los hombres deben cubrirse la cabeza con el típico gorro judío kipá.
El cementerio es del siglo XIII, aunque durante la Guerra Mundial quedó muy dañado. El muro exterior que rodea al cementerio es conocido como Muro de los nombres, por homenajear a los judíos de Frankfurt que murieron durante el Holocausto. En el interior aparecen las lápidas cubiertas de musgo, y el lugar transmite una mezcla de sobrecogimiento a la vez que belleza.
Museo judío Judengasse
En el callejón de los judíos, Judengasse, estuvo uno de los primeros guetos judíos de Europa, que se convirtió en un importante centro cultural judío que fue arrasado por la invasión francesa. En el siglo XX se realizaron las excavaciones que hoy nos permiten hacernos a la idea de cómo fue la vida hebrea en este lugar.
Jardín de las Palmeras o Palmengarten
El Jardín de las Palmeras es un precioso jardín botánico con plantas de todas las partes del mundo. Lo que más me sorprendió fueron sus invernaderos. Me quedo con la enorme variedad de cactus y palmeras, con el estanque, la gruta, el ambiente tropical y la exposición de camelias. Además si tu visita es en primavera, te encontrarás el jardín de rosas en pleno apogeo y además podrás sentarte a descansar y disfrutar del lugar en alguno de los bancos del jardín.
Jardín de las Palmeras Palmengarten
Mainhattan
Se llama Mainhattan a la zona de rascacielos de Frankfurt, y pasear por ella es la guinda perfecta para un viaje a esta ciudad. El nombre hace referencia al Manhattan de Nueva York, con un pequeño juego de letras, utilizando el nombre alemán del río que atraviesa la ciudad, Main.
Entre los rascacielos más importantes de Mainhattan destaca la Torre Commerzbank con sus 259 metros de altura y 56 plantas, el edificio MesseTurm con 257 metros, y la torre cilíndrica Main Tower con 200 metros. La Main Tower ofrece la posibilidad de subir hasta un mirador, y también alberga un restaurante. Como capital financiera de la Unión Europea, Frankfurt es sede de numerosas entidades, como la del Banco Central Europeo y el Bundesbank.
Sede del Banco Central Europeo
Espero que con este repaso a la ciudad de Frankfurt, te hayan entrado unas ganas enormes de viajar hasta allí. ¿Qué es lo que más te gustaría conocer? Y si ya conoces la ciudad, ¿qué es lo que más te gustó? Si echas en falta algún rincón, me encantaría recibir tus recomendaciones.
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Referente al texto en el Puente de Hierro os puedo decir que fue colocado allí en 1999, diseñado por el artista Hagen Bonifer, en conmemoración de los 250 años del nacimiento de Göthe. El texto está redactado en griego antiguo, y se trata de un verso extraído de «La Odisea» de Homero, en la que hace referencia a los numerosos viajes por el Mediterráneo del héroe «Odyseus». Según el propio autor, la traducción es «Navegando por un mar del color del vino en busca de hombres que hablen lenguas distintas». La simbología por la cual el autor colocó el escrito en el lugar que se encuentra es, que al cruzar ese puente desde el centro comercial e industrial de la ciudad, se te abre el lejano mundo de Homero.
Hola Álvaro, muchísimas gracias por la información. Un saludo!
‘…Mientras navegando sobre el mar de color del vino hacia hombre de lenguaje extraño…’
Es la inscripcion del puente. Es un verso de la Odisea de Homero.
Con la traduccion siempre pierde, en griego tiene mucho sentido.
Muchas gracias Maria por la traducción. Buscaré a qué momento se refiere exactamente.
Gracias por su trabajo!!
Muchas gracias a ti por leerme. Feliz semana Jozef!
Hola!
A nosotros nos encanta Alemania y teníamos pensado hacer una escapadita al valle del Mosela, con base en Frankfurt. Este post nos viene de lujo, pues no pensábamos que hubiera tantas cosas por ver allí.
Me ha gustado mucho el puente, muy fotogénico! Y la plaza del mercado, tan alemana ella.
Un beso!
El puente es muy fotogénico, y tiene unas vistas magníficas. La plaza del mercado sí, típica típica alemana.
Después de vuestro viaje me han quedado unas ganas enormes de conocer Frankfurt. Estuvimos a una hora de allí este verano pero ya no nos daba tiempo a acercarnos, teníamos demasiadas cosas previstas para visitar. No tenía ni idea de todo lo que hay para ver y me ha sorprendido mucho. A ver si tengo ocasión de ir a conocer Frankfurt.
Un abrazo.
jeje tú te fuiste a Heidelberg, que es otra maravilla y yo aún no la conozco 😉
¡¡Qué bien lo pasamos y que de cosas hicimos!!
La verdad que sí! Sólo nos quedamos con ganas de ver funcionando los ascensores noria jeje
Pues me alegra mucho poder conocer a alguien que conozco bien Frankfurt, porque no tenía una imagen muy positiva de la ciudad. Mi chico estuvo una semana por allí y no vino muy contento. Tendremos que ir los dos para cambiar esta percepción. Muchas gracias por compartirlo!
Hola Maria Jose, esto es como todo, depende de los gustos y de lo que busque cada uno. A mí me pareció una ciudad muy interesante. Un saludo!