Viajando a Vaterstetten
Hoy he viajado a Vaterstetten, un pequeño pueblecito alemán situado 20 kilómetros al este de Munich. Seguramente no habréis oído hablar de él porque no aparece en las guías turísticas. No llama la atención culturalmente, pero sí tiene un parque tecnológico que le da bastante movimiento, donde incluso ha estado Siemens hasta hace poco tiempo. Como puedes imaginar ese parque tecnológico es el motivo por el que estoy yo hoy aquí.
He volado con Air Europa, el vuelo ha salido con algo de retraso porque hemos tenido que esperar a que despegaran unos aviones militares de la base de Torrejón de Ardoz. Increíble, nunca me había pasado. Por lo demás el vuelo ha ido muy bien, muy tranquilo, y me he pasado todo el tiempo revisando fotos en mi Mac. ¡Tengo tantos miles de fotos por revisar!
Cuando estábamos llegando a Munich he grabado con el móvil los últimos kilómetros hasta el aterrizaje. Aún no he podido ver el video a pantalla completa para saber si estará aceptable. Una vez hemos aterrizado, y como no había facturado equipaje, he buscado el cercanías que aquí se llama s-bahn y he cogido la línea S8 dirección Leuchtenbergring. Se ha hecho muy pesado el trayecto, va lento y además las distancias entre dos estaciones son larguísimas. En Leuchtenbergring he tenido que cambiar y he tomado el S6 hasta Vaterstetten.
Siempre que viajo a Vaterstetten me acuerdo de mis primeros años de consultora informática en que tenía que venir aquí varias veces al año a nuestras oficinas centrales. Hacía muchos años que no venía a Vaterstetten, y en los últimos 3 meses he venido ya 2 veces. La vez anterior fue cuando pude visitar los mercados de Navidad de Munich.
Al salir de la estación de Vaterstetten he estado un poco perdida porque era de noche y no hay apenas iluminación, así que no se veía ni el nombre de las calles, ni mucho menos mi mapa impreso de Google Maps. Así que por intuición he comenzado a caminar por el lado norte de la estación, sin tener mucha seguridad en que iba por el camino correcto a mi hotel. Iba por un lado contenta porque no había nieve en las calles, y por otro lado pensando que en otro país que no fuese Alemania no estaría caminando yo sola de noche, por una calle oscurísima, con muchas casas pero sin gente. Tras 10 minutos caminando por fin he encontrado a 3 personas y les he preguntado si conocían mi hotel. Por suerte sí lo conocían y sí llevaba la dirección correcta. En 5 minutos más ya estaba en el hotel.
El hotel es el Alter Hof y a primera vista me ha parecido chulísimo. Mañana con luz intentaré hacerle algunas fotos. Además he llegado algo cansada porque he tardado 2 horas desde que aterrizamos hasta que he llegado al hotel. Mañana espero poder hacer algunas fotos de este pueblo típico alemán, y si tengo suerte y no nieva quizás puedo sacar algún vídeo.