Girona día 1: Tossa de Mar, Sant Feliu de Guíxols, Ampuriabrava
Nuestra escapada de 2 días a Girona comenzaba. Como la noche anterior estábamos en Barcelona, primero trabajando y después en un concierto en el Palau Sant Jordi, imaginamos que terminaríamos ya de madrugada, y al día siguiente no querríamos salir muy temprano. En efecto así fue, menos mal que habíamos sido previsores de no reservar el coche de alquiler hasta el mediodía. Así tuvimos tiempo de levantarnos, desayunar y llegar con calma hasta la estación de Sants donde estaba la oficina de alquiler de Atesa.
Ya en el coche, salimos de Barcelona dirección norte tomando la carretera que bordea el Mediterráneo. Íbamos con total improvisación, ya que no habíamos planificado ningún tipo de paradas. Sólo sabíamos que nuestro destino final era Ampuriabrava, donde pasaríamos las dos próximas noches. Pusimos el gps y decidimos parar en los pueblos que nos llamaran la atención durante nuestro recorrido. Pasamos por Mataró y Lloret de Mar, pero no fue hasta Tossa de Mar que decidimos parar.
Tossa de Mar
Nos encontramos con un pequeño pueblo construido alrededor de la bahía de Tossa. Nos chocó muchísimo que hubiese dos barcos turísticos, ya que eso de utilizar la playa a modo puerto, en las playas que yo conozco la verdad que está totalmente prohibido.
En la vista sobre la bahía destacaba a la derecha la figura de una imponente fortaleza. Con lo que me gustan a mí los castillos, no pudimos resistir la tentación de subir hasta ella, y además de la parte histórica que encontramos, nos regaló unos paisajes increíbles del mar y algunas calas, así como de los tejados del pueblo de Tossa de Mar, con la Iglesia parroquial de Sant Vicenç destacando entre ellos.
En la parte alta del castillo encontramos las ruinas de una antigua iglesia gótica, y una sorprendente y atractiva escultura homenaje a Ava Gardner por su película «Pandora», que fue rodada precisamente en Tossa de Mar.
Escultura homenaje a Ava Gardner
Sant Feliu de Guíxols
Desde Tossa de Mar cogimos una carretera que nos dio unas magníficas vistas pero fue infernal porque transcurría por montaña y eran curvas, y curvas y más curvas… ¡qué mareo! Tras una hora de viaje llegamos a Sant Feliu de Guíxols, famoso por su monasterio aunque nada más entrar lo primero que llamó nuestra atención fue el Arco de San Benito, del siglo XVIII, antigua puerta de entrada al recinto amurallado del monasterio.
Del monasterio, lo único que estaba abierto y por lo tanto pudimos visitar, fue la Parroquia Madre de Dios de los Ángeles (Parròquia Mare de Déu dels Àngels).
Parroquia Madre de Dios de los Angeles
Tras esta visita, paramos a descansar y a comer en el propio Sant Feliu de Guíxols. Eran cerca de las 5 de la tarde cuando comenzamos a comer, así que al finalizar ya nos fuimos directos hasta nuestro alojamiento en Ampuriabrava.
Ampuriabrava
Llegamos a nuestro alojamiento en Ampuriabrava y la verdad que fue todo un poco extraño. El hotel no era como esperábamos, y la verdad, nos sentimos algo engañados. Respecto a la ciudad, hacía algunos años había conocido un matrimonio de Girona que recuerdo me habían hablado de Ampuriabrava como «La Venecia de la Costa Brava». Y en verdad Ampuriabrava tiene canales, y es curioso ver cómo están los embarcaderos en los porches de las casas. Me gustó pero no me impresionó tanto como me esperaba, quizás porque los canales estaban alrededor de carreteras normales, y no me pareció una ciudad de canales sino, una ciudad con algunos canales, y para mi gusto le faltaba algo de encanto.
Aún así nos hubiera gustado tener vistas a los canales desde la habitación de nuestro hotel. No la tuvimos, aunque al día siguiente sí tuvimos algunas vistas que merecieron la pena. Pero no adelantemos acontecimientos, ya que eso forma parte del segundo día. De momento nuestro diario de viaje, y primer día por Girona finaliza aquí.
Como tú tenías conocimiento y expectativas sobre los canales de Ampuriabrava, te supo a poco….yo, como no tenía idea, me ha sorprendido…Todo es relativo…
Vaya, siempre pasa eso, mejor llegar sin saber qué te vas a encontrar ni que te lo pongan por las nubes. Me alegra que a ti sí te sorprendiera, que no estaba mal, pero no se parecía nada a Venecia como me dijeron, jaja