Escapada a Portugal: el paraíso vecino
En las últimas décadas la importancia que se le ha atribuido a las vacaciones ha ido en aumento. Esto no es de extrañar ya que los beneficios que suponen son numerosos. El cambio en la rutina, la evasión de las preocupaciones y la recarga de energía hacen que estos periodos nos beneficien no sólo a nosotros, sino también a los que nos rodean: ya sea en el trabajo, como en el ámbito familiar. Sin embargo, al contrario de lo que se cree, esa desconexión no tiene por qué implicar desplazamientos a lugares lejanos, sino que puede ponerse en práctica en lugares que se salgan de nuestra cotidianeidad, no necesariamente lejanos. Por ejemplo, realizar una escapada al mejor precio a Portugal pueden convertirse en unas vacaciones económicas y sin necesidad de viajar durante horas.
Así es, si vivimos en España tenemos la suerte de tener como vecino a uno de los países más ricos en historia, cultura y gastronomía. De hecho, buscando una buena oferta en plataformas como Buscounchollo.com podemos conseguir una escapada de unos días y descubrir la esencia del país luso: desde la belleza del norte, hasta los paisajes del Algarve, pasando incluso por la capital lisboeta.
Lisboa
Lugares seleccionados para una escapada a Portugal
O Porto: el encanto portugués
Situado en el noroeste del país, la ciudad no deja indiferente a nadie. Sus calles, sus recovecos y sus fachadas de colores y mosaicos son en sí un cuadro para contemplar. En algunas de sus zonas, todavía se mantienen costumbres como tender la ropa en los balcones, lo que genera un ambiente muy bonito estéticamente y también muy auténtico. Uno de los puntos más agradables en este sentido es el paseo que acompaña al río Duero, en el Barrio de Ribeira. Durante el paseo podremos admirar construcciones como el puente de Luis I, además de divisar al otro lado del río Vila Nova de Gaia. Si nos decidimos a cruzarlo, será una buena ocasión para colarnos en alguna de las bodegas de vino y degustar el famoso vino O Porto. Si viajamos con tiempo, otros puntos de interés son la Iglesia y torre de los clérigos, la Fundación Serralves o la librería Lello.
Lisboa: el sinónimo de belleza
Reza un refrán portugués: “Quen nao fui a lisboa nao viu coisa boa”. Podría traducirse al español como: “Quien no ha ido a Lisboa no ha visto lo que es realmente bello”. Y razón no le falta. La capital lisboeta es una ciudad llena de contrastes y, sobre todo, muy auténtica. La Torre de Belém, Alfama, el castillo de San Jorge o el Monasterio de los Jerónimos son algunos de los lugares que no deberíamos perdernos. Además, en Lisboa podemos encontrarnos mercadillos con todo tipo de productos a la venta, rincones llenos de arte callejero y una enorme oferta cultural. Si buscamos en los pequeños restaurantes, podremos incluso disfrutar de la buena comida a ritmo de fado. Una escena con gran encanto.
Las Azores: naturaleza pura
Hace unos años poco se oía hablar de esta isla portuguesa que alberga una enorme riqueza paisajística. Es el lugar ideal para mochileros o para aquellas personas que quieran hacer un viaje diferente. En ella podemos encontrar desde cráteres de volcanes, hasta nadar con los delfines. Apartadas del bullicio y del estrés, las Azores son una buena elección cuando se trata de desconectar.
