El día que subí a la Gran Muralla China
Subir a la Gran Muralla China fue una de las experiencias más gratificante e inolvidable de todo nuestro viaje a China, y que sin duda repetiría. Hay varias secciones de la Gran Muralla que se pueden visitar. Al ser la primera vez, optamos por el tramo Badaling, que es uno de los más seguros. Para la próxima visita, seguramente nos atreveremos con un tramo más arriesgado.
Muralla y torres de vigilancia de la Gran Muralla China
Visita al tramo Badaling de la Gran Muralla China
Nada más llegar a la base del tramo Badaling, ya se puede observar la grandiosidad de esta construcción que sobresale en el paisaje montañoso y recuerda a una serpiente que sube y baja reptando por la montaña. Se pueden ver a lo lejos y separadas varias torres de vigilancia. El reto está en llegar hasta la última caminando.
La duración de la visita a la Gran Muralla China suelen ser unas 2 ó 3 horas y no es nada sencilla ya que el camino es bastante dificultoso y suele haber muchísima gente. Nosotros tuvimos suerte porque fuimos en Noviembre y aunque había turistas no estaba tan masificado como en otras épocas del año. Sí nos llamó la atención que la mayoría de los turistas eran chinos.
La sección de Badaling ha sido casi totalmente reconstruida. A pesar de la reconstrucción, está formada por rampas muy inclinadas y escalones bastante altos y deteriorados que dificultan el ascenso terriblemente. Debes estar en bastante buena forma para este ascenso, ya que es bastante habitual abandonar a mitad de camino por falta de fuerzas. Lo recuerdo ahora y sí, fue realmente agotador. Para que os hagáis una idea, en nuestro grupo éramos más de 40 personas, y sólo 6 llegamos hasta el final debido a la dureza del trayecto. Es totalmente cuesta arriba y en algunas zonas bastante inclinado.
Durante el ascenso además serás asaltado por numerosos tenderos que intentarán convencerte para comprar camisetas o cualquier otro souvenir de la Gran Muralla China. A nosotros nos estuvo persiguiendo un tendero de manera agobiante durante parte del ascenso. Hasta que consiguió convencernos para comprar una camiseta. La verdad que la camiseta era muy barata, 15 yuanes (menos de 2 euros). Pero lo cierto es que sólo la compramos por su insistencia. Muchos turistas lo que compran es un certificado que demuestra que has subido a la Gran Muralla China.
Si consigues llegar hasta el final visitable, verás una lápida y un muro perteneciente a una torre de vigilancia en el que está la gente amontonada haciéndose la foto que demuestra que han conseguido llegar hasta el final. En este punto te encuentras a una altura de 1015 metros sobre el nivel del mar.
Lápida cercana al muro fin del recorrido
Desde la cima además podrás disfrutar de unas vistas realmente espectaculares, con una panorámica increíble de la Gran Muralla China, y además respirar un aire tan limpio que es impensable en Pekín. La realidad es que la visita merece la pena y altamente recomendable.
Vista panorámica de la Gran Muralla China
Después de disfrutar de las vistas, se desciende siguiendo el mismo camino de subida, teniendo muchísimo cuidado de no caerse, ya que algunas zonas están tan inclinadas que incluso han habilitado barandillas para ayudarse durante el ascenso y descenso.
Si no quieres subir a pie, también se puede subir en teleférico. Las experiencia y sensaciones no son las mismas, pero si tu forma física no es tan adecuada, mejor optar por teleférico, ya que al menos disfrutarás de parte de lo que es esta fascinante fortificación. ¿Te animas a ir? Yo ya estoy deseando volver a la Gran Muralla China.
He subido!!! y nunca había imaginado que en algunos tramos era tan angosta!!!! quedé destruída!!! obviamente hice parte de ella….y me he traído también como Jordi.. una regia camiseta!!! para no olvidar lo que había hecho. Aunque de verdad, a mi me emocionó haber estado allí días después de haberla visto…. en el momento no! nada de nada!!!
Espero poder conocerla el año que viene!
Si que hay gente, si… qué pena :
Siiiii…. subí y fue una de esas experiencias que cuestan más esfuerzo del que uno imagina!!!
Pues no la he visto nunca, ahora lo haré a trevés de vuestros ojos 🙂
Pues si China no es ahora un buen destino turísitco masivo es el momento de viajar… Cuantos menos turistas, mejor 🙂
Gracias por el relato
Totalmente de acuerdo contigo Miguel, mejor viajar cuando no está de moda, habrá menos turistas y seguramente es algo más barato.
Nunca la he subido, por ahora me conformo con recorrerla con vuestro post 🙂
Yo también la he subido. Y 2 veces. De la primera, hace 20 años, aun conservo una camiseta que pone » I climbed the Great Wall»!!!
espectacular!
Me encantaría conocer esta maravilla. Algún día!
Buenos tips para visitar la Muralla. Ya sé que tengo que entrenar antes, para poder subir caminando hasta el final 🙂 Lo que no me gusta es la insistencia de los vendedores, espero que no sea así a lo largo de toda la muralla y que haya lugares más tranquilos.
Sí Mauxi, entrena antes que es muy durita 😀 Lo de los vendedores es en algunos tramos, por suerte no durante toda la subida 🙂
Una experiencia única, debe ser muy gratificante llevarla a cabo. Obligada, viajeramente hablando. Menos mal que éste era el tramo seguro… me duelen las piernas de leerte. Las fotos son muy reveladoras de lo que es aquello.
Wowwww, hacia tiempo que no leía nada sobre China, debe ser un destino que no está de moda. Me han gustado mucho las fotos.
vaya asunto lo de los vendedores de camisetas :-). Aún con eso, menuda experiencia!
Saludos
Tienes razón Eva, se han puesto muy de moda otros países orientales y China ha quedado un poco en el olvido.
Ya lo hice.