Paseo en tuk tuk por Ávila, una ruta con encanto

Una actividad original y divertida que puedes hacer en Ávila es un paseo en tuk tuk. Y no te preocupes que no es como los antiguos rickshaw típicos chinos en los que el conductor iba corriendo, tirando del carro y sufriendo mientras tú disfrutabas. El paseo en tuk tuk por Ávila se realiza en un vehículo motorizado, el conductor va tan cómodo como tú, y además es una ruta con mucho encanto que te lleva a conocer los lugares más importantes de Ávila. ¿Quieres saber más?

Algunos datos del paseo en tuk tuk por Ávila

Dónde comienza el paseo en tuk tuk por Ávila

A este viaje a Ávila fui con mi amiga Kris, y nos alojamos en el Palacio Sofraga. Aunque el punto de partida oficial del tuk tuk es la calle San Segundo número 40, los tuk tuk nos estaban esperando un poquito más abajo, en la misma calle, pero ya pasada la Casa de las Carnicerías. Tardamos apenas tres minutos en llegar al tuk tuk desde nuestro hotel.

Cuando llegamos vimos que había bastante gente esperando para subir al tuk tuk. Menos mal que teníamos reserva. Si tienes claro que quieres hacer esta excursión, te recomiendo que hagas reserva previa para evitarte esperas.

Cómo reservar el paseo en tuk tuk por Ávila

En este enlace puedes realizar la reserva: paseo en tuk tuk por Ávila.

Qué es un tuk tuk

Un tuk tuk es un vehículo triciclo motorizado típico de los países asiáticos. Lo primero que me sorprendió fue el vehículo que encontré. Hasta aquel momento sólo había conocido un tuk tuk en Pekín, y aquél era muy básico ya que sólo estaba formado por un carro con una manta para cubrirse del frío, del que tiraba el conductor desde su bicicleta. Este tuk tuk de Ávila no tiene nada que ver, es muchísimo más moderno. Es un vehículo motorizado, y además eléctrico. Además si te fijas, tiene dos filas de pasajeros, con lo que entrarían hasta seis personas.

Otra cosa que llamó mi atención fueron el techo y puertas plastificadas. Esto hace que vayas protegido del frío y de la lluvia. Si viajas a Ávila en Navidad como fue nuestro caso, o en cualquiera de los meses fríos, de verdad que lo agradecerás, para seguir disfrutando de la ciudad, esté como esté el clima.

Precio del paseo en tuk tuk por Ávila

Cuesta 7 euros la entrada general de adulto, 5 euros el precio para niños, y 9 euros la ruta nocturna en tuk tuk.

Horario y duración del paseo

El paseo en tuk tuk por Ávila tiene una duración de 35 minutos que puedes realizar desde las 10 de la mañana hasta las 12 de la noche.

Recorrido del tuk tuk de Ávila

Éstos son los puntos de interés que puedes ver durante tu recorrido en tuk tuk por Ávila:

1. Plaza de Santa Teresa
2. Plaza del Rastro (Palacio de los Dávila)
3. Torreón de los Guzmanes
4. Iglesia y Convento de Santa Teresa
5. Mirador de los Cuatro Postes
6. Ermita de San Segundo
7. Palacio don Juan de Henao (Parador Nacional)
8. Arco del Carmen
9. Basílica de San Vicente
10. Catedral de Ávila
11. Plaza del Mercado Chino
12. Monasterio de la Encarnación
13. Muralla de Ávila

La ruta está pensada para conocer la ciudad desde el tuk tuk. De todos estos puntos, sólo se realiza parada en la que te puedas bajar en el mirador de los cuatro postes. En el resto, el tuk tuk para enfrente del monumento mientras escuchas una audición, pero no puedes descender de él.

Así fue nuestro paseo en tuk tuk por Ávila

Siempre que haces algo diferente, te ilusiona, y ya sólo por ese motivo, sabía que me iba a gustar. Si tuviera que resumir mi paseo en tuk tuk por Ávila es que fue muy divertido.

Partimos desde la calle San Segundo hacia la Plaza de Santa Teresa y a la Plaza del Rastro. Este recorrido ya lo conocíamos porque lo habíamos hecho el día anterior durante la visita guiada a Ávila, así que lo pude disfrutar de otra manera, sin la preocupación de tener que fotografiarlo, y sólo disfrutando de la vista y del paseo en sí.

El tuk tuk lleva una audición que explica los datos más importantes de los monumentos por los que pasa, aunque he de reconocer que me gustaba mucho más los apuntes que hacía el conductor; me parecían datos más curiosos, y además lo explicaba de una manera mucho más cercana, de tal forma que apetecía escucharle. La grabación es más monótona. Si me aceptan una sugerencia para el tuk tuk, yo la cambiaría por explicaciones exclusivamente del conductor.

Enseguida llegamos al mirador de los cuatro postes, que es uno de los miradores más conocidos de Ávila. De hecho cuando llegamos estaba llenito de turistas. Todos ellos querían sacar la panorámica de las murallas de Ávila, y también fotografiarse con los cuatro postes. Aquí el tuk tuk hace parada en la que te puedes bajar para obtener tú también la panorámica, siendo el único punto en el que puedes salir del tuk tuk.

Si volviera a hacer el paseo en tuk tuk, cambiaría la hora, para llegar aquí al atardecer. Cuando lo visitamos el sol daba de cara y es una pena porque molestaba bastante tanto para las fotos como en sí para ver la ciudad de Ávila. La imagen desde aquí al atardecer debe ser alucinante.

Por cierto, si no lo digo reviento. Nos molestó bastante ver niños que se subían a la cruz del monumento, alentados por sus propios padres. Nos pareció una falta absoluta de respeto por el patrimonio. No lo entiendo. De verdad que para darle este trato, y si no somos capaces de respetar nada, mejor que el ayuntamiento lo cerque y prohiba el acceso. Por favor, si vas a ir, respétalo.

En este mirador también puedes encontrar el monumento con las letras de Ávila, con las que también todos nos fotografiamos. Al fondo, entre el tuk tuk y las letras, puedes ver aparecer el edificio de la universidad de Ávila.

Después de esta parada, deberíamos haber emprendido el viaje de vuelta hacia Ávila, pero nosotros negociamos un cambio de ruta antes de partir, y nos llevaron hasta el mirador de la Canaleja. Está un poquito más adelante que el de los cuatro postes, y lo más importante, sin gente. Aunque la vista no es exactamente igual. Se ve gran parte de la muralla, aunque en primer plano choca la imagen de un edificio blanco moderno que es el Auditorio Lienzo Norte.

Tras esta parada ya sí emprendimos el camino de vuelta. Regresamos por el norte, subiendo por la carretera Ronda Vieja, que es la que bordea la muralla en su zona más bonita. Aquí llegaron las mayores risas del recorrido, puesto que la carretera está adoquinada y el tuk tuk bota mucho durante todo este tramo. No te puedes imaginar lo que nos reímos. Recuerdo que mi amiga Kris estuvo haciendo algún video hablando, y le costó varias tomas conseguir hablar bien jaja.

Ya después de esto, nos dieron una pequeña vuelta por algunas calles más de Ávila, pasando por la Basílica de San Vicente, mi iglesia favorita de Ávila, y ya regresamos al mismo punto del que habíamos partido.

El viaje fue tan entretenido que se pasó en un pis pas, y me quedé con ganas de más. Tienen también una ruta nocturna que me gustaría hacer la próxima vez que visite Ávila. ¿Y tú, te animas a hacer un paseo en tuk tuk por Ávila?